Ante la expectativa de una recuperación de la economía global en 2021, junto la contitnuidad de las políticas de estímulos monetarios, que mantendrán bajo presión al dólar, Wells Fargo ajustó sus pronósticos para las divisas emergentes. Y en el plano local, luego de haber estimado un dólar sobre los $800, el dinamismo de las materias primas es el principal factor del nuevo escenario que estima el banco de inversión.
Si bien las apuestas indican que la canasta de monedas emergente tendrá un positivo año, el mayor impulso lo recibirán aquellas divisas vinculadas a economías exportadoras de materias primas.
“Las monedas asociadas con economías impulsadas por precios más altos de las materias primas. En ese contexto, nos hemos vuelto un poco más optimistas sobre las perspectivas de corto a mediano plazo para el peso chileno y el real brasileño”, dice Wells Fargo respecto a sus pronósticos para 2021.
Nueva Constitución
Pero el rally del cobre no es el único factor que explica los pronósticos para el peso chileno. Luego del estallido social y el posterior plebiscito para una nueva Constitución, Wells Fargo consideraba que los ruidos políticos mantendrían bajo presión al peso chileno.
Sin embargo, el escenario dio un fuerte giro a jucio de los analistas del banco de inversión, pues el desarrollo del proceso constitucional “ha sido más cauto de lo que esperábamos ya que los chilenos votaron a favor de una convención constitucional sin controversias en torno a la votación. Con el siguiente paso en el proceso hasta abril de 2021, el riesgo político podría ceder por ahora y aliviar algo de presión sobre el peso”, explica Wells Fargo.
En concreto, los analistas proyectan que el dólar finalizará el año en $730, para luego bajar hasta los $720 en el primer trimestre del próximo año. Para el segundo y tercer trimestre de 2021, Wells Fargo asigna un nivel de $710 y $720, mientras que finalizaría el año en $720.
“Con la economía mundial entrando en un período de recuperación cíclica y retroceso del riesgo político local, creemos que la perspectiva a corto plazo para el peso chileno es positiva (...) Dada la dependencia de Chile del cobre como una exportación clave, los precios más altos del cobre podrían resultar en un alza para el peso, especialmente dada una disminución en el riesgo político por ahora. A largo plazo, todavía creemos que el proceso de reescritura constitucional dará lugar a nuevas manifestaciones en todo el país”, detalla Wells Fargo.
Otro factor que influye en el ajuste de las estimaciones es el retiro de los fondos de pensiones, pues el porcentaje de inversiones denominadas en dólares de las carteras de las AFP entrega “optimismo a corto plazo para el peso chileno”.
“Con la mayoría de los activos de pensiones denominados en dólares estadounidenses, el acceso temprano a los fondos de pensiones podría resultar en un alza para el peso cuando se convierte a la moneda local, lo que proporciona más optimismo a corto plazo para el peso. Por último, un repunte cíclico de la economía mundial podría hacer subir los precios del cobre”, dice el reporte.
Eso sí, Wells Fargo advierte que en el largo plazo, el proceso para una nueva Constitución podría derivar en nuevas manifestaciones, lo cual eleva el riesgo de una debilidad gradual del peso chileno frente al dólar a finales del próximo año.