Aunque la decisión de la SVS en el marco del Caso Cascada fue bien recibida por las autoridades y el mercado local en general, hay quienes cuestionan la falta de fundamentos de su determinación.

“No escucho de una sola prueba concreta ni fundamento como para involucrar a LarrainVial, a Manuel Bulnes y Felipe Errázuriz en este supuesto esquema”, sostiene Andrew Cummins, fundador de la administradora de fondos de inversión boutique Explorador Capital, que administra US$125 millones en activos en América Latina.

El director de la oficina de inversión con sede en Sao Paulo defiende la integridad de los ejecutivos de LV y asegura que las imputaciones atribuidas por la Superintendencia a la corredora de bolsa se alejan de toda realidad posible.

“Mi temor es que lo que esté dañando la confianza en el mercado de valores chilenos sea precisamente una investigación desprolija y con arbitrariedad como ésta, y un fallo totalmente desproporcionado como el de la SVS”, sostiene a PULSO, desde San Francisco, EEUU.

Con una vasto conocimiento del sector financiero, Cummins ha invertido por 21 años en el mercado chileno, en muchas operaciones en bolsa con LarrainVial. Sostiene que su experiencia siempre ha sido equitativa, transparente y de alta integridad. “El supuesto esquema no me cuadra y no es consistente con mi experiencia con LarrainVial”, reafirma.

“No es factible”

El ejecutivo argumenta que no es factible que una corredora de bolsa haya podido coordinar o efectuar aspectos importantes del supuesto esquema y recalca que en las operaciones examinadas por el SVS participaron seis corredoras independientes, no sólo una. Cummins explica que, además de conocer la integridad de las personas responsables de las principales operaciones, en la corredora existen sistemas de supervisión, transparencia y “chequeos y balanceos” que hace muy difícil que un grupo de individuos lleve a cabo tal esquema, sin alertar a las aéreas de control que tienen para evitar situaciones de ese tipo. “Para haber hecho lo que se le acusa, la corredora tendría que tener la capacidad de dirigir las voluntades y decisiones de los gobiernos corporativos de las sociedades en mención; poder controlar los actos de las otros importantes corredoras de bolsa de la industria y adivinar el precio futuro de las acciones durante el transcurso de cuatro años para asegurar el éxito de la supuesta maquinación”, afirma.

“Hemos visto en el reciente mundial de fútbol que a veces los mejores y mejores intencionados árbitros se equivocan. Mi intuición es que en este caso puede haber pasado eso con la resolución del martes”, declara.

Con todo, reconoce que el mercado chileno de capitales opera bien, destacando que es el segundo más importante de América latina, y que este caso abre una oportunidad para mejorar los gobiernos corporativos. Sugiere también cambiar la Superintendencia de Valores y Seguros a una Comisión de Valores colegiada e independiente del poder político de turno, que no actúe como juez y parte a la vez.