La Fiscalía surcoreana solicitó la detención del jefe de Samsung Group, Lee Jae-yong, acusado de haber pagado sobornos por varios millones de dólares a una amiga de la presidenta Park Geun-hye. Como consecuencia, las acciones de la multinacional cerraron este lunes con un descenso de 2,14% en la bolsa de Seúl.

La decisión de los investigadores se tomó luego de que el líder del Samsung fuera interrogado por un total de 22 horas durante la semana pasada, a raíz de la investigación sobre corrupción que llevó al Parlamento a iniciar un juicio político contra la presidenta Park.

La empresa líder en telefonía móvil, apenas se recuperaba del desastre generado por la explosión de las baterías del Galaxy Note 7, y en los últimos dos días de operaciones, los papeles de la compañía registraron una caída de 6,46% en la bolsa de Corea del Sur.

Samsung, el mayor conglomerado del país, abonó cerca de US$35,8 millones a una empresa controlada por Choi Soon-il, la llamada “Rasputina” y amiga íntima de Park, y a otras dos fundaciones sin fines de lucro vinculadas a ella. La fiscalía sospecha que la multinacional pagó estas grandes sumas para lograr que el Servicio Nacional de Pensiones, controlado por el Gobierno y accionista de una empresa del grupo, aprobara la fusión de esta y otra subsidiaria del conglomerado.

“La oficina de los fiscales especiales, al tomar esta decisión de buscar una orden de detención, determinó que, si bien las condiciones económicas del país son importantes, la defensa de la justicia tiene prioridad”, afirmó el vocero de fiscales, Lee Kyu-chul, en una rueda de prensa.

Samsung, por su parte, dijo que no puede aceptar las acusaciones que señalan que Lee haya pagado sobornos y calificó de “difícil de entender” la orden de detención contra su presidente de facto. “Nunca ha brindado apoyo a cambio de favores”, señaló la compañía mediante un comunicado.

El empresario de 48 años ocupa el cargo de vicepresidente de Samsung Electronics y tomó las riendas de la compañía en octubre, después de que su padre, Lee Kun-hee, sufriera un infarto.

La orden de detención de Lee está ahora en manos del Tribunal del Distrito Central de Seúl, que instruye el caso sobre la relación entre las grandes empresas surcoreanas y la amiga cercana de la persidenta Park, ‘’La Rasputina’’, y anunciará una decisión el próximo miércoles.