A toda máquina espera trabajar Arauco, ligada al grupo Angelini, para reducir el impacto ocasionado por el paro portuario. Y es que se estima que los 11 días de paralización que se registraron en los puertos de Coronel, Lirquén y San Vicente Terminal Internacional, en la VIII Región, derivaron en que la forestal no haya podido embarcar 150 metros cúbicos de producción, lo que se tradujo en una facturación de US$150 millones.
"No hemos finalizado el cuarto trimestre, entonces no tengo una estimación de si los volúmenes serán lo suficientemente altos. Probablemente serán menores porque hubo una huelga en los puertos que terminó hoy (ayer) y duró 11 días, y eso retrasa y afecta los envíos con la producción de Chile (…) Aún no sabemos el impacto porque trataremos de apurar los envíos hasta el último día del año" , comentaron desde la empresa en un conference call con inversionistas.
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En la cita, la forestal también comentó el estado de su proyecto más ambiciosos: la Modernización y Ampliación Planta Arauco (MAPA), iniciativa que contempla una inversión de unos US$2.500 millones y que recientemente destrabó sus flancos abiertos con la justicia. No obstante a la fecha, la compañía no le ha dado luz verde.
"El proyecto MAPA está aprobado por la autoridad ambiental pero aún no está aprobado por el directorio, aún no le hemos llevado la decisión para que se siga adelante con ese proyecto (…) No creo que esto sea discutido este año por el directorio, tal vez a inicio del próximo año, pero aún no tenemos un fecha", subrayaron.
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Desde Arauco comentaron que una de las alternativas que están barajando para llevar adelante la iniciativa sin comprometer su rating crediticio es que no todo el proyecto sea financiado con deuda. Esto considerando que la empresa ya tiene comprometido dos desembolsos significativos: los US$185 millones que se invertirán en el proyecto de Pulpa Textil y la compra de los activos de Masisa en Brasil.
Esta última operación totaliza unos US$102,8 millones y considera dos complejos industriales ubicados en Ponta Grossa (Paraná) y en Montenegro (Rio Grande do Sul), que entre ambos poseen una línea de tableros MDF con una capacidad instalada de 300.000 m3 anuales, una línea de tableros MDP con una capacidad instalada de 500.000 m3 anuales y cuatro líneas de recubrimiento melamínico con una capacidad instalada de 660.000 m3 anuales.
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Esta operación fue recientemente aprobada por el Consejo Administrativo de Defensa Económica (CADE) de Brasil.
