¿Por qué sólo 25 compañías de 70 que fueron invitadas de la industria mundial de la pulpa y el papel, participaron del Environmental Paper Company Index (EPCI) 2013?
No es una respuesta que tengamos nosotros, pero la ONG WWF, desarrolladora de este Índice de transparencia en esta industria,tiene una lectura. "Más importante que los resultados obtenidos, es la transparencia mostrada por los participantes. Las empresas que se negaron a participar han perdido la oportunidad de demostrar los esfuerzos que podrían estar llevando a cabo para hacer frente a sus problemas ambientales", dice Emmanuelle Neyroumande, directora de Pulpa y Papel de WWF Internacional.
El dato interesante para Chile es que de 25 empresas en el mundo que finalmente constituyen el índice, dos son locales: CMPC y Arauco. "Participan por primera vez en las herramientas de transparencia que promueve WWF mostrando su desempeño ambiental dentro de sus operaciones a nivel nacional. Para WWF Chile se trata de un gran avance que además permitirá de aquí en adelante realizar un monitoreo de la huella ecológica de la producción de pulpa y papel de las compañías chilenas", dice Cecilia Alcoreza, coordinadora de pulpa y papel de WWF Chile.
Cuando WWF va tras estas compañías a buscar que expongan sus prácticas de manejo de su negocio es porque es un sector de fuerte impacto ambiental. Pero también, porque las empresas forestales tienen en sus manos parte de la solución, pues trabajan con recursos renovables y serán claves para la conservación de los bosques en una era donde habrá escasez.
"Aun cuando la industria papelera ha mostrado algunos avances en las últimas décadas, la naturaleza globalizada de la industria exige objetivos sectoriales, metas ambientales ambiciosas para el abastecimiento responsable, producción y uso de sus productos y máxima transparencia. El EPCI puede ayudar a la industria de pulpa y papel en su camino de mejora continua y a la sociedad a conocer más en profundidad el desempeño de estas empresas", declara la ONG en su comunicado de prensa.
WWF también plantea que al hacer este ejercicio, las empresas pueden mostrar públicamente que son líderes en transparencia. Además, es información que se muestra a compradores de papel, inversionistas y otros públicos de interés que se toman el tema de la responsabilidad ambiental en serio. Pero también permite al mercado en general a reconocer este esfuerzo de avanzar hacia la sustentabilidad.
Los participantes debieron contestar un cuestionario de estándares exigentes, que permitió construir indicadores para conocer la huella ecológica de 40 categorías de productos de pulpa y papel. Más del doble de los evaluados en el primer Índice en 2011, según informa WWF.
El EPCI entrega información estandarizada del desempeño ambiental de estas compañías, tras una medición de aspectos relacionados con la responsabilidad en la fuente de la fibra, impacto en el clima y agua y en el sistema de manejo ambiental.
Las empresas del EPCI 2013 en conjunto producen el 14% del papel y cartón, el 28% del papel gráfico, el 29% del papel para periódico, el 14% del tissue y el 6% del papel/cartón para embalaje. A su vez, producen el 14% de la generación mundial del pulpa/celulosa.
Las compañías indexadas son: Appleton Coated (Norteamérica), Arauco (Sudamérica), Arjowiggins Graphic (Europa), BillerudKorsnäs (Europa), Bio-PAPPEL (Centroamérica), Cascades (Norteamérica), CMPC (Sudamérica), Domtar (Norteamérica), Fedrigoni (Europa), Fibria (Sudamérica), ITC (Asia), Klabin (Sudamérica), Lecta (Europa), Lenzing Papier (Europa), Metsä Group (Europa), Mondi (Sudáfrica), NewPage (Norteamérica), Norske Skog (Europa), Resolute Forest Products (Norteamérica), SCA (Europa), Södra (Europa), Sofidel (Europa), Stora Enso (Europa), TNPL/Tamil Nadu (Asia), UPM (Europa).
Más allá de la acción de esta ONG global, también hay otras iniciativas que promueven un desempeño ambiental responsable en esta industria, debido a lo clave que es la protección y buen manejo de los bosques para el futuro.
Una es la certificación del Forest Stewardship Council, más conocida como FSC y que es valorada como la de más alto estándar en esta industria y que puede llevar a un largo proceso de hasta años, conseguirla.
En Chile la industria forestal se ha sumado a este proceso, que es muy intensivo, pues considera también las relaciones con las comunidades indígenas, entre otros factores. En septiembre pasado Arauco recibió el sello FSC tras un proceso iniciado en 2009. Pero un grupo de ingenieros forestales ha hecho públicas sus diferencias al respecto.
Charles Kimber: "participar en este proceso nos permite continuar mejorando"
Al llamado a participar del segundo EPCI que hace WWF, acudió Arauco, que finalmente, quedó en la lista de los 25. Charles Kimber, gerente de asuntos corporativos y comerciales de Arauco, nos responde al respecto.
¿Qué significa esto para la empresa?
-Para Arauco es muy importante participar en mediciones como es el Environmental Paper Company Index 2013, y es especialmente valioso por los parámetros que involucra y los objetivos a que se orienta.
Resulta estimulante que organizaciones como la WWF inicien iniciativas como estas, que sirven para entender y tomar acción frente a nuestra performance e impacto ambiental.
¿Participar en este proceso significó desarrollar algunas acciones o simplemente mostrar lo que ya estaban haciendo?
- Venimos implementando desde hace varios años una política sólida y permanente en materia de sostenibilidad de nuestras operaciones, desde iniciativas en el campo de la investigación e innovación de los recursos forestales hasta programas de largo plazo con las comunidades con las cuales nos relacionamos. En este sentido, participar en este proceso nos permite continuar mejorando.
Este reconocimiento internacional llega en un momento importante para Arauco, pues decidieron no apelar al fallo de primera instancia de la Corte de Apelaciones de Valdivia que responsabiliza a la compañía por el caso de los cisnes del humedal Carlos Andwanter. ¿Esperan que este tipo de acciones (participar en el índice de una ONG como WWF) los ayude a restaurar las confianzas perdidas con la comunidad?
- Con las comunidades donde se ubican nuestras operaciones, como el caso de Valdivia, venimos construyendo una relación basada en el respeto y el diálogo, en la capacidad de desarrollar una mirada común a los problemas de las comunidades y del medio ambiente, en la posibilidad de generar compromisos y, en definitiva, de trabajar juntos. Por cierto, un resultado de ese proceso es regenerar las confianzas, en un camino que, a medida que avanzamos, se hace cada vez más ancho y provechoso.
Participar en este cuestionario de WWF es parte de nuestro proceso de transparencia con partes interesadas.
Más allá del fallo judicial, la imagen de Arauco se vio dañada por el episodio de los cisnes. Desde entonces hasta ahora, ¿qué esfuerzos ha hecho la compañía por lograr un desempeño responsable de sus impactos en el ambiente y las personas?
- Siempre es importante sacar conclusiones y lecciones en casos como este. Un hecho que ha sido clave es el importante tejido social que hemos desarrollado en torno a las comunidades con las que nos relacionamos. Parte del aprendizaje de ARAUCO ha sido generar un diálogo abierto, transparente y participativo, que sienta las bases de un "modelo" que se adapta a una nueva realidad. Un caso paradigmático es Constitución, donde compartimos con su gente el drama que significó el terremoto del 27 de febrero. A través de la participación y diálogo con más de 22 mil personas se generó, por ejemplo, la iniciativa PRES-Constitución, el Plan de Reconstrucción Sustentable. Ello ha permitido que el vínculo de la empresa y su entorno se profundice.