Cerca de dos años en espera estuvieron las intenciones de la aseguradora de vida española Divina Pastora de arribar a nuestro país
Después de haber sostenido reuniones con el intendente de seguros, Daniel García, a comienzos de 2016, donde le hicieron ver su interés, el 2 de noviembre pasado volvieron a las oficinas de la Superintendencia de Valores y Seguros, según consta en el portal de Lobby del regulador.
Según explica desde España Ignacio López, secretario general de Divina Pastora, "la primera reunión fue más de cortesía (...) esta reunión fue para decirle que tenemos la intención de pedir la autorización para una compañía de vida".
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De todas formas, precisa el ejecutivo, pese a que aún no entregan la documentación necesaria para obtener la aprobación, "tenemos la intención de solicitar la autorización durante el primer semestre y a partir de ahí se inicia un proceso que entendemos puede significar que en un año y medio estemos operando". Con esto, Divina Pastora iniciaría su segunda operación en la región, después de Argentina, donde están desde 2012.
Respecto del costo que implicaría esta operación, López explica que "el mínimo regulatorio está en UF 90 mil (unos $2.408 millones) y la inversión sería algo superior. Por nuestro volumen, la cifra puede ser significativa, pero tampoco supondría un gran desembolso".
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En cuanto a las razones para tener a nuestro país en el radar, el ejecutivo señala que "por proximidad a nuestra oficina con Argentina hemos hecho viajes de prospección, y bueno, la seguridad jurídica y de supervisión que nos ofrece Chile, la verdad es que nos parece atractiva. Para nosotros es el país más estable de la región".
Con todo, al cierre de 2016 la aseguradora tuvo una facturación de 233,28 millones de euros (unos US$275,2 millones de dólares), de los cuales 217 millones de euros corresponden a primas de seguros.
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