Parapente: el encanto de volar
Surgió como la evolución del paracaídas. Pero, a diferencia de éste, que pone resistencia a la caída, el parapente permite experimentar una verdadera sensación de vuelo, pues cada 9 metros avanzados desciende sólo uno. Su auge se debe, en gran medida, al turismo extranjero.
Vio su vida en un segundo. "Después me olvidé de todo, fue sólo disfrutar, lo repetiría sin duda, ya cuando llegué al suelo pensé en los riesgos que tenía, pero ya había terminado todo". Así fue la primera vez en parapente de María Fernanda Vargas, gerente de operaciones de SyG Online. Se puede alcanzar una velocidad entre 50 y 80 kilómetros por hora. Según Roberto Valdés, instructor de esta disciplina, "no es necesario que las personas tengan un conocimiento previo. Lo único que deben cumplir es ser mayores de edad y que el peso entre equipo, instructor y el pasajero no supere los 220 kilos". Los vuelos parten en los $35.000, Chileparapente es una de las escuelas con certificación que vuela camino a San José de Maipo. Más información en Chileparapente.cl
[ze_adv position="adv_300x100" ]
Canopy: capeando árboles en el Mahuida
Significa "copa de los árboles" y puede practicarse en Santiago y alrededores. Se trata del Canopy que llegó en los '90 y que se ha consolidado como una práctica apta para toda la familia.
La Reina, Colina y el Cajón del Maipo ofrecen varias alternativas con trayectos que van entre los 360 y los 2.500 metros de extensión. El Parque Mahuida, por ejemplo, cuenta con un recorrido de 1.600 metros de longitud con 12 estaciones. Para los más pequeños (entre 5 y 11 años) está la modalidad tandem, en la que realizan el circuito acompañado de un guía. Para más información visite Vertigopark.cl.
[ze_adv position="adv_300x250-A" ]
A 35 minutos del centro de Santiago, Geoaventura cuenta con un canopy de 2.500 metros de extensión. La subida se hace en un vehículo 4×4, en grupos de 10 personas y dura un poco más de una hora con vista a las quebradas y el bosque nativo. Más información en Geoaventura.cl.
Trekking para recorrer con toda la familia el parque Puente Ñilhue
Saltos y cascadas, flora y fauna, glaciares, cerros y valles, y miradores con vistas espectaculares, se esconden en la precordillera. El parque Puente Ñilhue está conformado por senderos de trekking y alta montaña que permiten al visitante alcanzar las cumbres del cerro Provincia a 2.750 m y del cerro San Ramón a 3.250 m. La cumbre de este último se encuentra fuera de los límites de Puente Ñilhue, y se puede acceder a él por rutas de alta montaña. Aguas de Ramón con sus 3.642 hectáreas cuenta con tres posibles recorridos. Uno es el Canto del Agua, un paseo de 25 minutos que rodea el sector bajo del Estero Ramón, ideal para hacerlo con niños. Le sigue en dificultad, el Paso Los Peumos, un sendero que se recorre en tres horas y medias. Y por último, el más avanzado, el Salto de Apoquindo, dura siete horas y su máxima atracción es la llegada a una cascada de 30 metros de altura. Otra alternativa es Yerba Loca.
[ze_adv position="adv_300x250-B" ]
Disfrutar del salto en paracaídas en Curacaví
Con la promesa de adrenalina y una vista sin igual, el paracaidismo es una actividad que se puede disfrutar en las cercanías de Santiago.
Subir en un avión a 13.000 pies de altura (4.000m), pararse en la puerta, mirar abajo y saltar, es algo que prometen nunca olvidará. Los instructores señalan que uno de los aspectos más relevantes es salta junto a un instructor certificado. Esto permitirá que la única preocupación de quién salte sea disfrutar cada segundo de la experiencia. Curacaví es una de las locaciones predilectas, pues tiene una vista privilegiada a la cordillera de Los Andes, y el monte Aconcagua, con sus 6.962 msnm y nuestra costa con el Océano Pacífico. La modalidad tandem (enganchado vía arnés al instructor) es la más habitual. Los valores parten en $150.000 por persona.
[ze_adv position="adv_300x250-C-net" ]
Vientos a favor de los deportes náuticos como el kayak
A 73 km del centro de la capital se encuentra el embalse El Yeso, reserva de agua color turquesa con 253 millones de m3. Ahí, agencias de viaje como Kayak Australis ofrece un día de deportes en la reserva por $65 mil, y $167 mil por dos días. Actividades similares pueden realizarse en la laguna Carén, ubicada en el kilómetro 19 de la Ruta 68, en la comuna de Pudahuel, destaca por sus bosques de eucaliptos, espinos, algarrobos y maitenes. Allí también se puede practicar yachting y pesca de carpas y pejerreyes. Otra laguna que ofrece diversos atractivos es la Esmeralda, en Melipilla. Durante el período estival, el viento sopla más fuerte, llegando hasta los 20 nudos, lo que permite a los deportistas disfrutar de la navegación a vela y practicar windsurf. Otra alternativa es la laguna de Piedra Roja o por qué no, aprovechar la poca distancia que hay a la playa y practicar algún deporte en el mar.
Enfrentando rápidos por el río Maipo
A solo 50 km de Santiago se encuentra el Río Maipo, considerado como el mejor y más famoso río de la zona central de Chile para practicar rafting.
Con 9,4 km, Cascada de las Ánimas opera la sección de rafting más larga del Río Maipo. En la bajada se encontrará de frente con 34 rápidos, 8 de los cuales son de categorías IV y +IV (éstas llegan hasta la VI). Se trata de 65 minutos de adrenalina ininterrumpida. Desde Cualquier persona es bienvenida a vivir esta experiencia; de hecho, más del 70% de los clientes que llegan a hacer rafting, lo hacen por primera vez. Altura, peso y madurez son los factores a considerar cuando el guía decida si pueden participar los niños en el descenso. Como regla general no se permitan niños menores de 12 años. En tanto, muchos adultos mayores de 70 y hasta 80 años que se encuentra en buen estado de salud pueden hacer rafting. Más información en Cascadadelasanimas.cl
Flyboard: volando sobre el agua en Rapel
Usar la potencia de una moto acuática para ser propulsado desde el agua. Con esa idea, Franky Zapata diseñó en 2011 una tabla y un mecanismo para conseguir elevarse hasta 15 metros sobre el lago o el mar. El flyboard, a pesar de su poco tiempo, ha conseguido sumar muchos adeptos en Chile. Los primeros indicios de este deporte en nuestro país surgieron hace cinco años, en el lago Rapel. Sin embargo, hoy busca consolidarse como uno de los principales deportes náuticos.
Alberto Feldman, instructor de Flyboard Chile, cuenta que su práctica ha crecido muchísimo. "Se ha visto una respuesta favorable del público, llegando a doblar la cantidad de personas que piden instrucción para aprender".
En promedio, las clases cuestan desde $45.000 y constan de 10 minutos de explicación teórica y 20 minutos de vuelo.
Para reservar en Marina Golf Rapel puede llamar al +56 9 6678 1415 o visitar el sitio marinagolfrapel.cl.