A dos semanas de las elecciones, la Presidenta Michelle Bachelet encabezó su último consejo de gabinete antes de los comicios. La reunión que se realizó a primera hora de ayer en La Moneda, duró un poco más de dos horas y terminó con un mensaje claro y preciso de la mandataria a sus ministros: intensificar el trabajo en terreno, informando los logros del Ejecutivo y con ello, reforzando el mensaje del "legado".

"No estamos hablando de términos electorales. Estamos hablando aquí de lo que le corresponde hacer a un Gobierno", dijo a la salida de la cita la vocera de Gobierno, Paula Narváez (PS), en relación al llamado que habría hecho Bachelet a su gabinete, agregando que "no estamos jugando con las conciencias de las personas, lo que estamos haciendo es mostrando nuestro trabajo, un trabajo transparente y digno, de cara a la gente".

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Es que en la cita que -además se dio sólo horas antes de que la jefa de Estado viajara a Vietnam para participar de la Cumbre APEC- la mandataria también habría transmitido un llamado a la unidad del sector, pero manteniendo con especial cuidado la prescindencia de sus secretarios de Estado, luego de las críticas que se han generado desde la oposición.

Sin embargo, a la salida de la reunión, el diagnóstico para algunos fue más descarnado, entre ellos, el ministro de Hacienda, Nicolás Eyzaguirre (PPD), quien apuntó que al sistema político, incluida la Nueva Mayoría, como responsable de las dificultades de transmitir los logros de esta administración. Según Eyzaguirre, hay "una dosis de excesiva de autocrítica, de canibalismo y a veces es importante que, no obstante, se destaquen los errores, también se vean las cosas en su contexto, porque destacar errores saca prensa, pero hace que la gente tenga una imagen tergiversada de lo que está ocurriendo".

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Asimismo, Eyzaguirre apuntó a la responsabilidad del oficialismo. "Es obvio que la oposición va a hacer eso (las críticas), pero los nuestros hacemos un llamado a la unidad, sobre todo ahora que va a venir la primera vuelta. Esperamos que haya segunda vuelta y que el mundo que ha acompañado a este Gobierno se una en torno a continuar la obra de la Presidenta Bachelet", añadió el encargado de la billetera fiscal.

Precisamente ese mensaje se repitió unas horas más tarde, cuando en el comité político con los partidos, Narváez habría pedido "bajar el tono" a las críticas cruzadas que han liderado los dos candidatos presidenciales del oficialismo Carolina Goic (DC) y Alejandro Guillier (ind.). La reflexión habría sido secundada por el timonel del PPD, Gonzalo Navarrete y el vicepresidente del PR, Patricio Tombolini, en la línea de mantener una buena relación con miras al balotaje, pese a la tensión entre los abanderados que se mantiene. Una muestra de eso, es que a la salida del comité, el timonel (s) de la DC, Matías Walker, señaló que "la soberbia no es buena consejera", en relación a los dichos de Guillier en Tolerancia Cero, quien comentó que en las eventuales negociaciones programáticas de segunda vuelta, no iba adoptar el programa completo "de alguien que sacara un cuarto de sus votos". "Hablar de Alejandro Guillier ya no tiene sentido, él se hace daño a sí mismo cada vez que habla", agregó el diputado.

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