Septiembre es el mes para bajar las posiciones en algunos desarrollados y aumentar la presencia de los mercados emergentes, según el último informe de estrategia de Banchile Inversiones. La entidad recortó el peso de la zona Euro en su portafolio recomendado desde el 11% que aconsejaban en agosto, a 8,5% para el presente mes. Según detalló, este cambio obedece a riesgos políticos y la ausencia de flujos en la región.

Para Japón, en tanto, recortaron la ponderación de 6% a 4,5%. ¿La razón? El escepticismo respecto a la efectividad de la política monetaria.

Al contrario, los mercados emergentes prácticamente duplicaron su presencia en la cartera recomendada de Banchile, desde el 3,5% de agosto a 7,5%. La decisión obedecería a tres elementos. El primero, la mejora de los indicadores de producción industrial y las expectativas manufactureras en dichos países. Junto con ello, la presencia de planes de infraestructura en ASEAN-5 elevaría  la probabilidad de correcciones alcistas en el crecimiento. En segundo lugar, los bajos retornos de la renta fija desarrollada habría llevado a los inversionistas a buscar yield en los emergentes y, en el último mes se habría dado una incipiente rotación de dichos flujos desde bonos a acciones emergentes.

En tercer lugar, la entrada de flujos proveniente de inversionistas institucionales, retail y de fondos pasivos daría cuenta de un mayor optimismo respecto a estos países.

En el caso de Estados Unidos, Banchile mantuvo su presencia en el portafolio de renta variable global en 49,5%. Esta decisión se basaría en los favorables fundamentos del consumo, a la presencia de un elevado nivel de caja de las empresas, y por los efectos favorables sobre la inversión que se producirían ante renovados planes de infraestructura pública.

En el mercado de renta fija, en tanto, en Banchile continúan sobre ponderando los papeles locales respecto a los internacionales.