Itaú Unibanco Holding SA superó el miércoles las estimaciones de ganancias del primer trimestre, al beneficiarse de controles de riesgo a los préstamos y costos más estrictos que permitieron que el mayor banco de Brasil por valor de mercado recortara gastos operacionales y provisiones por pérdidas crediticias.

La ganancia neta recurrente, una medida a la utilidad que excluye ítems extraordinarios, subió un 6% a un récord de 6.166 millones de reales (1.960 millones de dólares) respecto a los tres meses anteriores, y superó la estimación promedio de analistas compilada por Thomson Reuters de 6.010 millones de reales.

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Las ganancias de Itaú aumentaron pese a la caída de los ingresos por comisiones e intereses, en medio de menores costos de endeudamiento y una demanda aún débil de préstamos y servicios financieros en Brasil.

Los controles de gastos y los esfuerzos por reducir las morosidades ayudaron a elevar los retornos por acción hasta el mayor nivel en cinco trimestres.

Los gastos no vinculados a intereses bajaron 8% el trimestre pasado, a su mayor ritmo en un año y por encima de las expectativas del mercado.

Ese declive refleja el éxito de una estrategia de cuatro años para mejorar la eficiencia impulsada por Roberto Setubal, quien esta semana jubiló luego de 23 años al mando del principal banco de América Latina por valor de mercado.

Tanto Setubal como su sucesor, Candido Bracher, mantuvieron los objetivos operacionales de Itaú para este año, que fueron revelados por primera vez en febrero.

Ya que la tasa de morosidad a 90 días permaneció estable en 3,4% en el libro de créditos de Itaú, la gerencia del banco recortó las provisiones en 7% a 5.392 millones de reales, el menor nivel en casi tres años. Sin embargo, la cifra quedó por encima de las estimaciones promedio de 4.543 millones de reales para el trimestre.