El favorable escenario externo que enfrenta Chile implicaría que el país crezca por encima de la tasa de 2,6% proyectada por Bank Of America Merrill Lynch, según la firma estadounidense.
Tras una visita a Santiago en la que se reunió con autoridades, economistas, analistas políticos y fondos de pensiones, la analista Ana Madeira concluyó que "el optimismo se ha extendido después de la elección del candidato amigable con el mercado Sebastián Piñera".
En un informe publicado ayer, la analista Ana Madeira recordó que el consenso del mercado anticipa una expansión de 3,5% en 2018 ,5% "y parece que esta tendencia al alza en las expectativas de crecimiento podría incluso alcanzar niveles más altos".
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Sin embargo, la especialista no está de acuerdo con la proyección de un sólido repunte de la inversión.
Si bien los factores del crecimiento cíclico impulsarán el mayor dinamismo este año, la entidad cree que los riesgos al alza de su estimación de 2,6% "es más probable que se materialicen por una positiva sorpresa en el sector externo en vez de una inversión mayor a la esperada".
Madeira advirtió que el gobierno enfrenta un Congreso fragmentado, lo que "podría retrasar la implementación de medidas y dificultar la intensidad de un repunte de la inversión".
Además, la economista pronostica que la significativa recuperación que mostró la confianza en los últimos meses no se mantendrá a lo largo de este ejercicio. "Aunque el aumento en la confianza empresarial tendrá algún impacto de profecía autocumplida sobre la inversión en el corto plazo y añadirá a su recuperación en curso, no esperamos que sea suficiente para impulsar el crecimiento del PIB muy por encima de 3%".
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La experta prevé que la inversión subirá a inicios de este año para luego estabilizarse en niveles más bajos en la segunda mitad de 2018. Madeira puntualizó que los indicadores líderes ya podrían estar dando señales de desaceleración en el segundo semestre.
En cuanto al sector externo, la analista aseguró que éste "se mantiene benigno y esperamos que gane impulso este año y que sea un importante impulsor del crecimiento".
La compañía vaticina que el peso se depreciará hacia fin de año, lo que debería "sostener un alza en las exportaciones y contener algo las importaciones".