Beatriz Silva: La primera chilena que compite por un puesto en el Parlamento catalán

Mañana la vida de Beatriz Silva (48 años) cambiará rotundamente si es que se convierte en la primera chilena en ocupar un puesto en el Parlamento catalán. Todas las encuestas así lo confirman: la periodista, número cuatro en la lista del Partido Socialista de Cataluña (PSC) será electa diputada en los comicios que enfrentan a independentistas y constitucionalistas. En conversación con PULSO vía Skype, Silva, dice que hasta hace tres semanas continuaba con su rutina laboral, escribiendo para algunos medios. En los últimos días, sin embargo, se ha convencido de que la rutina sufrirá modificaciones. "Tendré que ir al Parlamento e integrarme en la actividad legislativa, ponerme al día, que no va a estar fácil", comenta desde su departamento en Barcelona.

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El cine y las juntas con amigos han sido reemplazadas -por el momento- por entrevistas y mítines, que en España son encuentros políticos cotidianos. Silva, que nació en Santiago y que sueña con volver a Chile, pero a vivir en Tongoy, reconoce la incertidumbre que genera la conformación del próximo Gobierno, debido al conflicto interno que vive Cataluña tras el fallido intento independentista del pasado mes de octubre.

De lo que sí tiene certeza es que continuará con sus tareas cotidianas, pese al importante cargo que asumirá. Comenta que en España "no existen las nanas. Aquí tienes una señora de la limpieza que viene una o dos veces a la semana, pero todo el mundo cocina, va al supermercado, busca a los niños en el colegio, no existe el concepto de la servidumbre, cosa que en Chile me gustaría que se avanzara". Beatriz Silva, nacida en Santiago el 11 de septiembre de 1969 y que dejó el país en 1995, pero mantiene intacto el acento, es crítica de nuestro país.

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Habla de la desigualdad social, que le choca cada vez que viaja a Chile. Dice que le sorprende "ver cómo vive una parte pequeña de la población con unos estándares como si fueran ricos del primer mundo y tú avanzas y ves estas poblaciones de casas pequeñitas que parecen como de cartón".

Es más, grafica esa postura con otro ejemplo: "voy al supermercado en Chile y pienso... tú compras yogures, un poco de pollo y sale 40 mil pesos. Hay gente que gana $350 mil y tú dices cómo vive la gente, cómo lo hace para comprar una canasta de productos básicos. No es lógico que haya gente ganando esos sueldos y haya otra que se gasta $500 mil en una cartera".

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Es la perspectiva crítica de una chilena que se confiesa deportista, amante del charquicán de cochayuyo, de la hallulla y que aprecia una torta de manjar porque según su perspectiva "en España no hay tanta pastelería".

-El PSC decidió ampliarse hacia un partido que es heredero de otro, que es democratacristiano. Entonces se integraron en algunos lugares dos o tres miembros de este partido y además incorporaron independientes comunistas y entre esos estoy yo. Entonces, la idea era integrar a alguien independiente que esté más a la izquierda del PSC, con una trayectoria feminista, con activismo por los derechos de la infancia. Porque Cataluña vive un momento de crisis político-institucional que ha afectado nuestras vidas, nuestra convivencia y la economía. Sentía que era el momento de hacer algo y es pasar del activismo en la calle a tratar de hacerlo en el Parlamento. Nunca, desde 2012, el Presidente de España y el Presidente de Cataluña se han sentado a negociar una salida. El problema se ha hecho grande y ahora hemos llegado a una situación crítica.

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-Cuando me llamó Miquel Iceta (candidato socialista a liderar el Gobierno catalán) para ser la cuarta de la lista estaba súper sorprendida, porque es un lugar destacado y yo no soy militante. Es un regalo. Llevo años en la plataforma Federalistas de Izquierda en que trabajamos de forma transversal. Tengo contacto con ellos porque hacemos cosas. En el PSC la gente me ha recibido bien, porque a alguien no le puede parecer que le den el cuarto lugar a quien viene de afuera y que no ha hecho, aparentemente, algún mérito para tenerlo, pero la verdad es que ha sido todo lo contrario. Me han recibido con los brazos abiertos, la gente es cariñosa y los compañeros de la lista son súper integradores. Hemos trabajado bien y estoy muy contenta.

-No soy partidaria de la prisión preventiva si tú no tienes un delito de sangre. Lo que sí han hecho es malversación de fondos públicos. Se han gastado un montón de dinero en organizar el referéndum y en cosas que no estaban aprobadas por el Parlamento. Robaron datos de todos los ciudadanos y los pusieron en varios servidores que ahora son de fácil vulneración. La cesantía juvenil es del 30% y la conselleria, que está dedicada a los programas de inserción laboral, sacó dinero de ahí para el referéndum. Alguien tiene que responder por esto. Ahora que hicieron la manifestación en Bruselas los únicos apoyos fueron partidos xenófobos horrorosos. Contrataron la agencia que le hizo a la campaña a Barack Obama para una de sus grandes campañas publicitarias a nivel europeo. Desde que están en Bélgica su desprestigio crece porque Europa empieza a verlos como un problema, como radicales que no tienen razones para lo que piden.

-Consiguieron algo de simpatía antes del referéndum pero con todo lo que ha pasado los diarios europeos los machacaron sin piedad. Ha sido súper negativo todo lo que han hecho, los únicos partidos que los apoyan son de ultraderecha.

-Tengo buena impresión. Hay una crisis de los partidos y se está produciendo un cambio y es ahí donde surgen nuevas alternativas. En el contexto español los comunistas irían dentro del Frente Amplio y no en la Nueva Mayoría. Está bien que la gente vote por un partido que la ilusione y no porque es lo menos malo. Piñera no va a combatir la desigualdad.