La Dra. Claudia Ortiz,  bioquímica de la Universidad de Santiago, presentó la tecnología desarrollada por Ambiotek SpA, un un spin-off de la Universidad que busca vincular la ciencia con la industria a través del desarrollo de innovadores procesos que permiten -entre otros-  tratar, estabilizar y remediar suelos y aguas impactados por actividades industriales, proceso denominado "fitorremediación".

Las fitotecnologías se basan en el uso de plantas y microorganismos endémicos que se seleccionan por su proceso de aclimatación en ambientes explotados económicamente. Esta técnica consiste en la utilización de sistemas biológicos, los que actúan como digestores, para contrarrestar los efectos contaminantes de la minería.

Es así como, por ejemplo, en sólo seis meses se ha logrado disminuir en 30% los sulfatos de aguas residuales derivadas de las faenas mineras. Sus aplicaciones también consideran el tratamiento de desalinización de aguas marinas, a través de sistemas de biofiltros, que se transforman en una alternativa más eficiente para la industria minera.

 "Estas tecnologías permiten avanzar hacia un desarrollo industrial", afirmó la Dra. Ortiz sobre su proyecto que ya se aplica en Chile –en faenas mineras de Codelco y Enami- y cuyo próximo desafío es incorporarlo en el extranjero.