Under Armour no logró darles a los inversionistas una señal muy necesaria de que está recuperándose de una serie de reveses.
Una caída constante en su división norteamericana compensó el crecimiento en otros lugares y llevó a la empresa a recortar sus pronósticos de ingresos y ganancias para el año. Además, las ventas en el tercer trimestre quedaron por debajo de las estimativas de los analistas, lo cual hizo que las acciones llegaran a caer 18 por ciento en las primeras operaciones de este martes.
[ze_adv position="adv_300x100" ]
Estos últimos doce meses, la marca deportiva fue acosada por una desaceleración del crecimiento, sus primeras pérdidas netas e inquietudes respecto a las zozobras de su flamante división de calzado. Under Armour se fundó como fabricante de equipos de entrenamiento para fútbol americano y luego obtuvo un crecimiento explosivo al expandirse a otras categorías. Parecía que la compañía tenía una división de calzado formidable, y en 2016 esta superó los US$1.000 millones en ventas, pero este año tuvo problemas.
[ze_adv position="adv_300x250-A" ]
"Los indicadores fundamentales de Under Armour siguen debilitándose", dijo Tom Nikic, analista de Wells Fargo & Co., en una nota a los clientes. "El deterioro del mercado deportivo norteamericano parece haber sido el principal culpable".
Las acciones de Under Armour cayeron a US$13,46 en las operaciones anteriores a la apertura de la sesión. Este año habían bajado 44% hasta el cierre del lunes, con lo cual presentan uno de los peores desempeños en el índice Standard & Poor's 500.
[ze_adv position="adv_300x250-B" ]
La empresa con sede en Baltimore recortó su perspectiva de ventas para el año a un aumento de niveles bajos de un solo dígito. Esta disminución le sigue a otra realizada en agosto de un crecimiento de 11 por ciento a 9 por ciento. La empresa también recortó su proyección de ganancias excluyendo ciertos rubros a entre 18 centavos y 20 centavos de dólar por acción, frente a una franja anterior de 37 a 40 centavos.
Críticas
La marca de Under Armour quedó golpeada este año, cuando su fundador y máximo ejecutivo, Kevin Plank, dijo que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sería "muy valioso" para el país por su experiencia como empresario. Esto suscitó críticas de Steph Curry, la estrella de la NBA. Curry es el patrocinador más famoso de la empresa y es fundamental para su división de calzado; posee una línea propia de zapatillas de básquet.
La empresa está en pleno proceso de lanzamiento de varias versiones de su cuarta edición de las zapatillas Curry —las Curry 4— y la última fue postergada. Se lanzó el 27 de octubre, pero no en las tiendas, y la entrega de los pedidos online está programada para el 18 de noviembre. La empresa no quiso brindar detalles, pero afirmó que la próxima combinación de colores de las Curry 4, que sale el 11 de noviembre, estará disponible por internet y en las tiendas.
[ze_adv position="adv_300x250-C-net" ]
Los ingresos ascendieron a US$1.410 millones en el tercer trimestre, informó la empresa. La cifra no alcanzó el promedio de estimativas de US$1.480 millones. Excluyendo algunos rubros, las ganancias fueron de 22 centavos de dólar por acción. Los analistas habían proyectado una ganancia de 19 centavos.
Los inversores de Under Armour no pueden hacer mucho contra Plank. El máximo responsable controla la empresa con la mayor parte del poder de voto mediante una clase distinta de acciones. Los accionistas acordaron mantener esa configuración en 2015, cuando votaron la creación de acciones sin derecho a voto.