Hacia un impredecible final corrían ayer el presidente demócrata de EEUU, Barack Obama, y el ex gobernador republicano por Massachusetts, Mitt Romney, momentos antes de una disputa muy peleada por la Casa Blanca, tratando de convocar a partidarios y atraer a votantes indecisos en un puñado de estados clave.

Porque un sondeo del Washington Post señaló que por primera vez ambos candidatos están empatados incluso entre los votantes independientes, aquellos no registrados como republicanos, ni demócratas, con 46%. En una semana marcada por el huracán “Sandy”, 79% de las personas consultadas consideró que el presidente tuvo una gestión del desastre “buena” o “excelente”, lo que le puede traer rédito político.

En tanto, otra encuesta de Reuters/Ipsos arrojó que de 3.805 posibles votantes encuestados a nivel nacional, 48% dijo que favorecerá al demócrata Obama, mientras que 47% dijo que votará por Romney.

Ayer el presidente de EEUU visitó la localidad de Concord (New Hampshire), acompañado de Bill Clinton para seguir en Florida, Ohio y Colorador. Romney, por su parte, trabajó en Des Moines (Iowa), Cleveland (Ohio), Morrisville (Pensilvania) y Newport News (Virginia).

REÑIDA CONTIENDA
Los candidatos han aplanado las calles intentando convencer a los electores estadounidenses de que voten por ellos. Se vieron las caras en tres debates presidenciales, donde se defendieron con uñas y dientes, y sus equipos salieron a convencer a la gente para que sufragara de manera anticipada. Gastaron cientos de millones de dólares y trataron de atraer al mayor número de rostros a su campaña. Por eso, al parecer no es mucho lo que pueden hacer cuando faltan apenas 24 horas para una de las elecciones más reñidas de la historia que enfrentará a Obama con Romney.

Se dice que esta será una de las elecciones más caras de la historia. En el caso de Obama, ha recaudado un total de US$632 millones y ha gastado US$540 millones, y sus principales contribuyentes han sido la Universidad de California, Microsoft y Google, según el think tank estadounidense Center for Responsive Politics. En tanto, el candidato republicano ha recaudado un total de US$389 millones y ha gastado US$336 millones, y sus principales contribuyentes han sido -como era de esperar- los bancos: Goldman Sachs, Bank of America, Morgan Stanley, JPMorgan y Credit Suisse.

Ahora, más allá del aporte en efectivo, también está el apoyo en influencia. Así, el ex secretario de Estado estadounidense Colin Powell, Joseph Stiglitz, Paul Krugman y Bill Gates, dieron su apoyo a Obama, mientras el multimillonario Donald Trump, Sheldon Adelson y Jack Welch están con Romney. Los periódicos estadounidenses también han dejado claras sus opciones. Mientras el New York Times y el Washington Post apoyan a Obama, el New York Post está del lado del candidato republicano.

VOTO A VOTO
Se espera que cerca de 100 millones de personas voten hasta mañana -dado que en Estados Unidos existe la votación anticipada, ya han sufragado 16 millones de personas- y el apoyo es uno de los más disputados en la historia. Según Real Clear Politics, la semana pasada Romney registraba un 47,9% de las preferencias, mientras el candidato demócrata tenía 47,1%. El resto de las encuestas no variaba mucho: la de Gallup mostraba un empate de 48%, Pew Research registraba un empate de 47%, y la mayoría de las otras muestra una diferencia de un punto porcentual entre los candidatos.

Y es que a la gente le gusta el rol de comunicador de Obama y considera que su personalidad es encantadora, además de considerarlo un buen líder, es decir, su prevalencia es básicamente por empatía, mientras que de Romney les gusta que es buen empresario, tienen fe en su política económica y llevaría ideas frescas al gobierno.

Para el mercado de las apuestas la cosa parece estar más clara. Según el sitio de apuestas irlandés Intrade.com, las probabilidades de que gane Obama eran la semana pasada de 64,5%, en comparación con el 35,3% de probabilidades para Romney. En el caso del primero, las acciones transadas alcanzan los 2,5 millones, mientras en el caso del segundo, los títulos transados llegan a 2,2 millones.

Pero uno de los mercados de apuestas más acertados es Iowa Electronic Markets (IEM). En elecciones y primarias presidenciales en Estados Unidos desde 1988 a 2004, IEM ha predicho los resultados finales de una elección mejor que las encuestas en 74% de las oportunidades, según un estudio elaborado por profesores de la Universidad de Iowa.

Más aún, el mercado supera de manera significativa a las encuestas en casi cada elección cuando se proyecta con más de 100 días de adelanto. La semana pasada, un contrato futuro para Obama se transaba a 63,8 centavos en el mercado Winner Take All, de IEM, lo cual significa que los operadores ven un 63,8% de probabilidades de que gane el voto popular en la elección de mañana. Los futuros de Obama se han estado transando en el rango de entre 60 y 65 centavos las dos últimas semanas. Por su parte, los operadores veían un 38,9% de probabilidades de que Romney ganara.

La suerte está echada. Ahora veamos qué dicen los ciudadanos estadounidenses.