Pulso

Caso Supermercados: Cencosud tilda de "tirante" relación con los proveedores avícolas

“El poder de negociación del retailer frente a los operadores es muy complejo. Es muy difícil. Frente a una posición prácticamente monopólica de poder es muy difícil obtener algo más”.

El gerente general corporativo de Cencosud, Jaime Soler, explicó ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) la “compleja” y hasta “tirante” relación que mantiene el retailer con los proveedores avícolas debido a la fuerte concentración del mercado. Es que ayer fue un día clave en el caso de la supuesta colusión de los supermercados, ya que los gerentes generales de Walmart, SMU y Cencosud fueron a prestar testimonio en el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia. En el caso de Soler su declaración duró más de tres horas.

“(El mercado del pollo fresco) tiene particularidades especiales. Hay que pensar que el principal operador de alimentos en Chile es una gran compañía que domina el mercado de pollo, cerdo y pavo”, sostuvo el ejecutivo en alusión a Agrosuper.

Si bien, Soler aclaró que con su declaración no apuntó a efectuar “un juicio a los polleros”, sí habló de una relación compleja.

Para la Fiscalía Nacional Económica (FNE), Cencosud, Walmart y SMU “han participado de un acuerdo o práctica concertada destinado a fijar, por intermedio de sus proveedores, un precio de venta para la carne de pollo fresca en supermercados que fuera igual o superior a su precio de lista mayorista”. Según la entidad antimonopolio, tal conducta se ejecutó al menos entre los años 2008 y 2011, restringiendo o tendiendo a restringir la competencia en precios.

Para las tres cadenas dicha conducta no existió.

A modo de ejemplo, Soler explicó que Cencosud viene desde 2006 haciendo esfuerzos -que los profundizó en 2012- de importar pollo desde Argentina y Estados Unidos. Sin embargo, el ingreso de pollo fresco ha resultado  imposible por temas tecnológicos.

“La gran característica que tiene este mercado es que es totalmente concentrado en el principal proveedor de alimentos de Chile. Entre los dos principales actores manejan el 90% del mercado del pollo en Chile. Por eso sus características hace muy difícil la negociación del operador desde el retail al proveedor”, remató Soler.

El ejecutivo recalcó, ante las consultas del magistrado Eduardo Saavedra, que “no es el espíritu de Cencosud vender bajo el precio de costo”. Admitió, además, que el pollo es un producto sensible, pues genera flujo de clientes.

Mientras Soler declaraba, en salas paralela los hacían sus pares de la competencia. A la salida, el gerente general de Walmart Chile, Horacio Barbeito, -cuya declaración se extendió por una hora y 40 minutos- rechazó la acusación de la FNE.

“Tenemos nuestras políticas, controles y programas muy robustos. Además, hacemos capacitaciones permanentemente. Por supuesto que rechazamos que hubo colusión. Nosotros estamos tranquilos”, dijo el ejecutivo.

En esa línea, Barbeito, frente al presidente del Tribunal de Libre Competencia, Enrique Vergara, dijo desconocer cuál es la participación de las ventas de carnes blancas que se tienen de trutros, pechuga y el pollo entero.

Por otra parte, explicó cuáles son las áreas que dependen de la gerencia general, como las áreas de Operaciones, Compras, Ventas y Marketing, Recursos Humanos. Las áreas de compliance o libre competencia informan directamente a la matriz en Estados Unidos. Esto último, por un factor de independencia, explicó el ejecutivo ante el TDLC.

Barbeito detalló que han llevado a cabo programas que fomentan la libre competencia.

En el caso de SMU, su gerente general, Marcelo Gálvez, detalló que trabajó para Walmart durante 23 años en distintos cargos. Sin embargo, admitió que solicitó información interna en enero de este año, cuando la FNE presentó el requerimiento contra las cadenas.

Por otra parte dijo que la contestación al requerimiento de la Fiscalía fue aprobado por la gerencia general.

SMU acusó a la FNE de no entregar pruebas sustanciales: “Sólo se sirve de comunicaciones bilaterales supermercado/proveedor, extrayendo algunas de ellas en forma absolutamente descontextualizadas, para intentar construir artificiosamente y sin éxito una teoría colusiva inexistente”.

Según la compañía, estas prácticas eran “procesos de negociación legítimos que se realizaban a diario con los proveedores”.

De la misma forma que Cencosud, argumentó falta de rigurosidad y contradicciones: “Una acusación tan grave no es avalada por ningún antecedente sólido y coherente, ni respaldada en fundamentos económicos del comportamiento del mercado”.

Más sobre:PortadaEmpresa

COMENTARIOS

Para comentar este artículo debes ser suscriptor.