Lleva menos de un año en la presidencia del Grupo Volvo para Latinoamérica, pero Claes Nilsson conoce bien los mercados de la región y está optimista respecto a que la contracción que viven algunos países es algo “cíclico”.

Por eso mismo, proyecta que las inversiones del grupo (US$500 millones en los últimos cinco años) darán grandes frutos cuando mejoren las situaciones de mercados como Brasil.

En su visita a Santiago, el presidente de Grupo Volvo, que reúne marcas como Volvo Camiones, Renault Camiones y Mack, analizó con PULSO el escenario actual de la operación de la compañía en la región.

¿Cómo ven el escenario actual de la industria?, ¿cuáles son las perspectivas que ven para 2015?

No es el mejor momento para la industria de los camiones y del transporte. Son momentos difíciles para este sector en Latinoamérica. Hay diferentes razones en los distintos mercados. El mayor mercado para nosotros en la región es obviamente Brasil y allá existen problemas políticos y económicos. La economía ha estado muy apoyada en el gobierno, por lo cual las condiciones para comprar camiones en Brasil son muy diferentes a lo que era antes.

Creo que esta parte de Latinoamérica, con Chile y Perú, es más estable. No obstante, si se compara con tres o cuatro años atrás en que existió el boom se ha caído. Luego tenemos Argentina y Venezuela, donde existen muchas complicaciones. Estamos presentes en muchos países que atraviesan momentos difíciles por varias razones.

En este contexto, ¿dónde ven los crecimientos de ventas?

Vamos a continuar creciendo en Latinoamérica, en todos estos países. Estamos convencidos de que los mercados que se están contrayendo van a levantarse. ¿Cuándo? Eso es lo difícil de predecir. Algunos aspectos políticos son un poco impredecibles. Creemos que la contracción es un tema puntual en este momento, pero Latinoamérica va a seguir siendo un mercado atractivo.

Como grupo, todos estamos optimistas con el desarrollo de la región y continuaremos con las inversiones a futuro en productos, servicios de postventa, etc.

Entonces, ¿este es un año de consolidación de las inversiones ya hechas en la región, como las plantas de Brasil?

Recientemente atravesamos un periodo de grandes inversiones en nuevos productos para todos nuestros mercados. Además, tuvimos inversiones en una planta en Curitiba, Brasil, y también en la red de distribución y prestación de servicio aquí en Chile. Fue un tiempo de fuertes inversiones. Ahora, vamos a continuar invirtiendo en diferentes instalaciones a lo largo de Latinoamérica. Pero las grandes inversiones en nuevos productos e industria ya se hicieron.

¿De cuánto fueron esas inversiones?

En Chile invertimos US$28 millones en instalaciones en los últimos dos años. En tanto, en Brasil sólo con la nueva fábrica fueron US$350 millones. En Perú fueron US$50 millones y en Argentina cerca de US$8 millones. Creo que podemos decir que hemos invertido alrededor de US$500 millones en la región en los últimos cinco años. Esto obviamente fuera de las inversiones que el grupo hizo para el desarrollo de las nuevas líneas de productos.

Respecto a Chile, ¿cómo ve Volvo este mercado?, ¿qué proyecciones tienen?

Nuestras expectativas de desarrollo del mercado chileno están muy en línea con lo que ha direccionado la Asociación Nacional Automotriz de Chile (ANAC). Creemos que va a ser un mercado bastante más estable que los últimos dos o tres en que las ventas bajaron mucho. Quizá las ventas serán un poco menor que el año pasado, pero ya mostrando una tendencia de estabilización. Creemos que las bases están y esto es un tema cíclico. Por supuesto que queremos seguir desarrollando la participación de nuestras marcas en el mercado, y por ello hemos hecho nuestras inversiones en la red de distribución.

¿Están actualmente en negociaciones con los distintos sectores productivos?

El mercado de camiones en general va muy bien cuando el de transporte también lo está. Cuando el mercado del transporte se frena, nosotros acompañamos a nuestros clientes. Lo que importa es que sigamos desarrollando la presencia de las marcas y atendiendo las necesidades. Tenemos que ser la mejor solución para cada necesidad, tanto con Volvo Camiones, Renault Camiones y Mack.

¿Cuál es la estrategia para enfrentar las contracciones de los mercados latinos?

Ser, por supuesto, muy cuidadosos sobre nuestros costos y nuestra eficiencia. Al mismo tiempo, es una buena oportunidad para trabajar en la satisfacción del cliente y ser mejor en servicios de postventa. En eso tenemos el foco ahora. Pero por supuesto que vamos a continuar con todo para estar listos cuando el dinamismo del mercado vuelva.

¿Cómo proyectan la importancia de esta región para el Grupo Volvo?

Las perspectivas para Latinoamérica son muy positivas. Ahora mismo Norteamérica está viviendo un boom y Europa está fuerte, pero América Latina está en nuestros planes y no dejará de estarlo.