Después de sufrir una fuerte baja en la Bolsa de Metales de Londres, el precio del cobre cayó a su nivel más bajo desde finales de agosto. Ayer, la libra de metal rojo cedió un 1,57%, retrocediendo hasta los US$3,0461.

La caída puntual del día de ayer no tiene un origen claro, pero analistas apuntan a que está influenciada por la publicación de cifras comerciales en China.

Desde Cochilco, el director de estudios Jorge Cantallopts comenta que los precios actuales del commodity están por encima de lo estimado y que se encuentran sobre sus fundamentales, por lo que se ha generado en el mercado una "sensación de sobreprecio" que ha gatillado una toma de utilidades recientemente.

En las últimas semanas, las posiciones especulativas han caído, según los últimos datos disponibles de la Commodity Futures Trading Commission.

Los contratos no comerciales (es decir, no ligados al intercambio físico de cobre) largos han bajado un 10% desde finales del mes pasado, mientras que los cortos han cedido un 9% desde mediados de octubre.

"Las recientes caídas en el precio del cobre pueden atribuirse a los datos de producción en China conocidos a comienzos de esta semana", comenta Antonio Moncado, economista de BCI Estudios.

Las cifras del gigante asiático, principal comprador del metal industrial, dieron "leve sorpresa negativa" al mercado, lo que pudo generar un desarme de posiciones largas, agrega el economista.

De todos modos, la volatilidad será el sello. "El ruido no nos asusta", señala Cantallopts, asegurando que esa corrección se debe a una "sobrerreacción" del mercado. Por sus fundamentos, agrega, esperan que el commodity cierre el año entre los US$2,95 y los US$3 por libra.

Los futuros del cobre se mantienen sobre los US$3 por libra: los contratos a diciembre de este año cayeron ayer un 1,4% hasta los US$3,0510, mientras que los futuros a diciembre de 2018 bajaron un 1% hasta los US$3,1205.

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