Un giro hacia la hidroelectricidad es el que planea dar la principal generadora eléctrica del Sistema Interconectado del Norte Grande (SING), E-CL, filial de Engie, ex GDF Suez.

La cuarta eléctrica más grande del país informó la creación de una nueva área de negocios para el desarrollo de proyectos hidroeléctricos de menor envergadura. De concretarse alguna iniciativa, sería la primera inclusión de E-CL en este tipo de energía, ya que la totalidad de sus proyectos se relacionan con energía térmica y, en menor nivel, con energía renovable no convencional.

“Nuestros esfuerzos están enfocados en buscar oportunidades en el Sistema Interconectado Central (SIC), tanto greenfield como plantas de gas y pequeñas hidroeléctricas, además de centrales eólicas y solares y M&A (fusiones y adquisiciones) que veamos en el SIC. (Miramos) especialmente centrales locales que busquen compradores”, dijo el gerente de finanzas de la eléctrica, Carlos Freitas.

E-CL tiene el 50% del mercado eléctrico en el norte grande y su primera incursión en el SIC se concretó con la adjudicación de un volumen de 5.040 GWh/año por un plazo de 15 años en la licitación de suministro eléctrico para empresas distribuidoras.

Sin embargo, hasta la fecha no tiene ningún proyecto en la zona central. La energía adjudicada será suministrada con el proyecto de generación Infraestructura Energética Mejillones (IEM) de 375 MW brutos, ubicada en la región de Antofagasta, y transmitida por medio de la línea de interconexión que la misma firma, a través de su filial Transmisora Eléctrica del Norte (TEN), está desarrollando.

Actualmente E-CL tiene un agresivo plan de negocios que incluye IEM, la línea de interconexión y el proyecto solar Pampa Camarones. Además, evalúa la concreción del proyecto solar de 34 MW El Águila II y la central eólica Calama, de 309 MW.

En el mercado hay preocupación acerca de que una incursión en el SIC por medio de plantas gasíferas y centrales hidroeléctricas presione el apalancamiento de la eléctrica, considerando que la deuda neta cerró en US$613 millones al término de 2015.

En la empresa aseguran que “tratarán lo más posible” de evitar un aumento de capital.  Antes de esta opción se analiza la venta de activos no estratégicos -como parte de sus activos de transmisión- u optar por bonos híbridos. Para el 2016, la empresa proyecta un Capex de US$ 482 millones.