El IPC de 2017 cerró con una variación de 2,3% y ya se proyecta que las presiones bajistas continuarán en el primer trimestre de este año, en lo que influye la caída experimentada por el dólar en las últimas semanas.
Antonio Moncado, economista de BCI, señaló que el primer trimestre "va a estar bastante condicionado por el precio de los alimentos, los que podrían generar una sorpresa para los primeros registros del año". Sin embargo, sostiene que el alza del valor de ciertos alimentos puede estar contrarrestada por algunas caídas de precios de bienes, "a partir del fenómeno del tipo de cambio que hemos visto en lo reciente".
[ze_adv position="adv_300x100" ]
El economista de Forecast Consultores, Ángel Cabrera, afirmó que la caída que ha tenido la divisa norteamericana "introduce un sesgo a la baja a las cifras que ya existían". Dado lo anterior, el experto espera para el mes de enero y febrero un IPC en torno al 0,1% o 0,2%.
En esa misma línea, desde Fynsa, el economista Nathan Pincheira vislumbró que "las proyecciones para enero y febrero no debiesen ser particularmente elevadas, máximo 0,2%. Después en marzo será un poco más elevada, causada por los elementos estacionales como la educación". En relación al primer trimestre, los economista pronostican una inflación que ronde entre 0,6% y 0,7%.
[ze_adv position="adv_300x250-A" ]
El economista Patricio Rojas, de Rojas y Asociados, coincide en las proyecciones para los primeros meses del año, donde en marzo se vería un alza de la inflación. No obstante, con respecto a las consecuencias que tendrá la baja del dólar, el experto considera que en enero "algunos efectos puntuales se van a ver en los paquetes turísticos, automóviles nuevos y en algunos alimentos que son importados, como las carnes".
Sebastián Senzacqua, economista jefe de Bice Inversiones, advierte que con niveles de inflación que están rondando el piso de tolerancia inflacionaria del Banco Central, se "genera un escenario de riesgo, donde sorpresas negativas retrasarían el período de convergencia y llevaría a repensar la necesidad de una mayor inyección de liquidez durante este año".
[ze_adv position="adv_300x250-B" ]
Desde Santander, el economista Álvaro González, afirmó que "en el corto plazo, se producirán reversiones en algunas de las caídas de precios recientes. Sin embargo, la reciente apreciación del peso presionará a la baja los registros inflacionarios". Añadió que "en ese escenario, lo más probable es que la TPM se mantendrá invariable al menos hasta el segundo semestre del año, para luego iniciar un proceso pausado de alzas".