Contadas con los dedos de una mano han sido las veces que Eduardo Fernández León ha dado su opinión del quehacer económico del país. Y ayer fue una de ellas. En el marco del seminario organizado por el ESE Business School de la Universidad de los Andes, el empresario conversó con PULSO para hacer una evaluación del año que se acaba de ir y del que asegura será un aún más complicado 2016.
Presidente de uno de los conglomerados empresariales más grandes del país -Grupo Fernández León- con participación en Consorcio por medio de Banvida con un 45,79%; Entel con un 11,84%; Banmédica a través de Inversiones Santa Valeria, con el 28,74%; Pucobre, dueño del 29,3% a través de FF Minerals, y socio mayoritario de Desarrollos Inmobiliarios FFV, el “negro” Fernández- como lo llaman sus cercanos- asegura que aunque en lo personal no se puede quejar, el 2015 fue en general un mal año para los negocios en Chile. Esto, indica, producto de los problemas económicos en el exterior, pero también por la incertidumbre generada por las reformas planteadas por la autoridad.
“Uno como que no sabe exactamente para dónde vamos, ni cómo vamos a salir de todo esto”, indica.
El tema central del seminario trata de hacer las mejores empresas “para el mundo” ¿le parece que debiese ser el lema de las empresas de hoy?
Creo que el cambio que se le hizo ahí a la frase ser “la mejor empresa en el mundo” por “la mejor empresa para el mundo” es el inicio de crear una empresa que tenga todos esos objetivos. Generar un producto, llamémoslo así, que sea aceptable para la sociedad, que sea aceptable para los consumidores, a un precio justo. Y eso creo que está haciéndose para el bien de la empresa, para el bien de los accionistas, generando una utilidad adecuada, pero también se está haciendo para generar beneficios para el mundo y la sociedad donde la empresa opera.
¿Hacia allá tienen que ir las empresas?
Creo que es una frase bastante generalizada, que tiene que traducirse no sólo en las empresas chilenas sino también en las globales.
¿Cómo vio el 2015 para el país?
Malito, bastante malito. Creo que el problema económico internacional no nos ha favorecido para nada. Nuestros productos, nuestras materias primas se han visto depreciadas muy fuerte.
Y después todo esto mezclado también con una inseguridad interna por el cambio de las políticas tanto tributaria, ahora la Constitución, el problema de la educación. Uno como que no sabe exactamente para dónde vamos, ni cómo vamos a salir de todo esto.
En ese sentido, ¿Cuáles son las reformas que más le preocupan?
Creo que la Reforma Tributaria no va a cumplir los objetivos para los cuales se formuló.
Ahora, la Reforma Educacional desgraciadamente creo que es bastante deficiente. No es para mejorar la calidad de la educación, sino que es al revés, para disminuir en general la educación para el alumno. Es bajar calidad y no mejorarla.
¿Y la Reforma Constitucional y Laboral cómo las ve?
Bueno, todavía en esa parte (Reforma Constitucional) estamos bastante en ayunas, no sabemos para dónde irá.
En general, creo que la Reforma Laboral va a ser mala tanto para la empresa como para la gente que trabaja en las distintas empresas. No creo que genere, llamémoslo así, algo pacífico sino que complicará enormemente el desarrollo del trabajo dentro de las compañías entre empleados y empleadores.
¿Cómo ve 2016 para la economía chilena?
Con el precio del cobre que estamos teniendo va a mermar mucho los ingresos para el Fisco y se ve una estrechez en presupuesto fiscal importante. No sabemos cómo van a seguir los precios de intercambio, para Chile es muy importante el cobre y cada día vemos que el precio va bajando en vez de estabilizarse o subir, eso es preocupante.
Volviendo al tema central del seminario, ¿cómo ha visto las polémicas en que se han visto envueltas algunas empresas chilenas el último tiempo, como por ejemplo la colusión del tissue?
Eso ha sido bastante conflictivo. Desgraciadamente se ha visto muchas cosas que han sido malas, negativas sobre todo para los empresarios porque nos han colocado en una situación muy difícil. Dios quiera que para adelante salgan cosas nuevas.
¿Eso se puede mejorar con mayor control por parte de las empresas?
Creo que eso se está haciendo, no me cabe la menor duda. Creo que esto para adelante va a cambiar.
Negocios
¿Cómo fue el 2015 para sus negocios?
No me puedo quejar, pero en general peor que los años anteriores. Y tenemos temor que los años que vienen van a ser más malos.
¿Cómo fue el año para Entel considerando el arribo de la compañía a Perú?
No soy la persona que podría hablar con más conocimiento de Entel, pero en general diría que para Entel ha sido un año, por un lado en resultados más bien malo, pero eso se sabía. Lo veíamos venir. Las inversiones que se han hecho en Perú están dando el fruto que se pensaba y, en general, en ese aspecto ha sido más positivo de lo que se podría haber pensado en un comienzo cuando se hizo la inversión allá.
¿Y el sector inmobiliario?
Muy bien gracias a Dios. En este sector hemos hecho muchas construcciones, sobre todo en la parte de edificios de oficina y en la parte de departamentos, en un segmento relativamente más alto. Hasta ahora estamos contentos pero vemos, por lo menos en la parte de oficinas, que los años que vienen por delante van a ser bastante difíciles.
¿Cómo ve las inversiones de cara al 2016? ¿Se van a frenar?
Eso es bastante lógico. Cuando uno no sabe el futuro tiende a esperar y no realizar inversiones importantes.