Los múltiples ataques aéreos lanzados por EEUU y sus aliados árabes contra los militantes islamistas en Siria fueron “los inicios de una campaña sostenida” que podría durar años, dijo ayer el Pentágono.
El teniente general Willam Mayville, director de operaciones del Pentágono, dijo que los ataques habían derribado vehículos, campos de entrenamiento y centros de control y comando controlados por los militantes del Estado Islámico o Isis, que durante el último año tomó el control de una franja de Siria e Irak.
Los ataques aéreos representan un cambio dramático de posición para un presidente que ha pasado tres año luchando contra la presión en Washington de involucrarse más en Siria y que prometió, cuando fue electo, terminar con las guerras del país en el Medio Oriente.
Explicando la escalada substancial del rol militar de Washington en el Medio Oriente, Obama subrayó el rol de los aliados árabes de EEUU en las acciones. “La fuerza de esta coalición deja claro al mundo que esta pelea no es sólo de EEUU”, dijo.
Separadamente, EEUU bombardeó instalaciones controladas por el grupo Khorasan, afiliado de al-Qaeda en Siria, cerca de Aleppo, luego de recibir información de que éste planea ataques “inminentes” en Europa y posiblemente en EEUU, dijo el Pentágono.
EEUU confirmó que había informado a Siria de los ataques antes de que empezaran mediante la ONU y que había advertido a Damasco “no comprometer los aviones estadounidenses”.
“No pedimos permiso al régimen. No coordinamos nuestras acciones con el gobierno sirio. No les dimos información adelantada en un nivel militar ni dimos ninguna indicación de nuestros tiempos en los objetivos específicos” dijo la vocera del departamento de Estados, Jen Psaki.
El ministro de Relaciones Exteriores de Siria dijo que el gobierno seguirá peleando contra Isis e hizo una llamado a la coordinación internacional “en los más altos niveles para derribar el terrorismo”. Rusia, un aliado clave de Siria, dijo que los ataques aéreos en Siria serían ilegales sin la autorización de Damasco o una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU.
El cambio de Obama
Habiendo definido una posición, en gran parte de su carrera, de contraste deliberado con el historial de su predecesor George W Bush, Obama ahora se encuentra a sí mismo en un conflicto que podría durar más allá de su mandato.
El año pasado el presidente amenazó con atacar por aire al régimen sirio, en la búsqueda de un trato sobre armas químicas cuando el apoyo político en su país se disipó. Sin embargo, la opinión pública se cuadrado con la acción militar en Siria luego de que dos periodistas estadounidenses fueran decapitados.
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