Este domingo 30 de junio, Marco Enríquez-Ominami llegará durante la mañana de vuelta a Chile. Pese a que tenía pronosticado regresar al país el lunes -esto tras haber realizado una breve gira por Estados Unidos  iniciada ayer- el candidato presidencial decidió adelantar su viaje.

Pese a que por razones obvias  ME-O no votará en las elecciones de este fin de semana, los comicios y sus resultados serán seguidos de cerca por él y su comando, por lo que se espera que ese mismo día realice una declaración pública.

A partir del próximo lunes se iniciará una segunda nueva etapa en la estrategia de campaña presidencial del ex diputado socialista con miras a las elecciones del próximo 17 de noviembre.

Durante los últimos meses, las actividades y despliegues del candidato progresista han estado centradas básicamente en establecer vínculos con organizaciones sociales, participación en foros universitarios, etc. La apuesta a partir de ahora, sin embargo, será reforzar las salidas a terreno y el contacto con la gente, especialmente de sectores populares.

Para concretar este nuevo plan de acción, en el comando se tomaron dos grandes decisiones. La primera, y tal como era esperado, desde ya se trabaja en el desembarco que tendrá la periodista y esposa del candidato, Karen Doggenweiler, en la campaña. Pese a que de acuerdo a la planificación interna ya está establecida la fecha exacta de su arribo, en el comando prefieren no especificar este tipo de detalles y sólo adelantar que este se concretaría entre la segunda quincena de julio y la primera semana de agosto.

En términos de estrategia de campaña, se espera que Doggenweiler tenga su propia agenda de actividades en el país y sólo en ocasiones específicas se sume a los despliegues de Enríquez-Ominami. Esto como forma de potenciar su imagen, que ya durante la campaña presidencial de 2009 entregó excelentes resultados a la candidatura progresista.

De acuerdo a las estimaciones del propio comando tras la revisión de algunas encuestas, actualmente ME-O estaría marcando cerca de 15 puntos en la primera vuelta. Con la incorporación del rostro de TVN se espera que esta cifra aumente por lo menos a 20. Además de este análisis, el equipo asegura que si Pablo Longueira (UDI) gana la primaria del domingo, las posibilidades de ME-O de pasar a segunda vuelta aumentarían. No así con Andrés Allamand, quien logra captar de mejor manera el voto más de derecha liberal.

A la incorporación de Doggenweiler al equipo, se suma la decisión del comando de arrendar un avión privado para realizar las giras por el país, el que será pintado con el logo y los colores de la campaña de ME-O. De esta forma, asegura su equipo, el candidato iniciará su cuarta gira por el país.

Pero las salidas a terreno no se centrarán exclusivamente en Enríquez-Ominami y su mujer. Será durante estos despliegues que el partido buscará potenciar todas las candidaturas a diputados y senadores que busca levantar la colectividad de cara a las elecciones parlamentarias de este año.

Pese a que el PRO intentará contar con candidaturas en todos los distritos del país, existe una acotada lista de prioridades, donde la colectividad desplegará sus mejores cartas, las que generalmente apuntan a complicar las aspiraciones de doblaje que existen en la oposición.

Sin embargo, una de las dudas que aún están presentes en el comando es definir si es que la colectividad impulsará candidaturas parlamentarias en distritos donde ex dirigentes estudiantiles y sociales tienen aspiraciones. Es el caso de Giorgio Jackson, en Santiago; Francisco Figueroa, en Providencia y Ñuñoa o Gabriel Boric en Magallanes. En el PRO estiman que si levantan postulantes en esas zonas pueden amagar la chances de los ex dirigentes.

La situación de Camila Vallejo sería distinta, a juicio de algunos militantes PRO, ya que la ex presidenta de la Fech, es parte del pacto Nueva Mayoría y apoya a Michelle Bachelet.

Por estos días también, Enriquez-Ominami junto a la cúpula del PRO han debatido la forma de incorporar a la campaña del ex diputado socialista a su padre, Carlos Ominami. Más allá que es una opción para integrar plantilla parlamentaria como senador, la posibilidad de que asuma la coordinación de una de las áreas de la campaña ha estado sobre la mesa. Se supone que en los próximos días debería existir una definición al respecto, teniendo en cuenta que para algunos en el PRO genera cierta incomodidad la estrecha relación que el ex senador socialista mantiene con varios de los dirigentes de la Concertación.