El domingo, los ecuatorianos acudirán a las urnas para elegir un nuevo presidente para los próximos cuatro años, tras una década bajo el mandato del socialista Rafael Correa.
La mayoría de encuestas dan al candidato del Gobierno, Lenín Moreno, la delantera, pero su apoyo sería insuficiente para ganar en primera vuelta.
En el balotaje, pactado para el 2 de abril, Moreno se enfrentaría a su más cercano perseguidor, Guillermo Lasso, o a Cynthia Viteri, quien a pesar de figurar como tercera en las encuestas ha venido subiendo rápidamente en los últimos días.
A continuación, perfiles de los tres contendientes con más posibilidades de sustituir a Correa en el Palacio de Carondelet.
LENÍN MORENO
Nacido en 1953 en Nuevo Rocafuerte, una región amazónica de Ecuador, Moreno se crió en el seno de una familia de maestros de escuela por lo que, tras estudiar Administración Pública, decidió dedicarse también a la docencia.
Posteriormente, se dedicó a actividades vinculadas con el turismo hasta que en 1998 quedó postrado en una silla de ruedas tras recibir un disparo en la médula durante un asalto.
A partir de allí, Moreno cambió radicalmente su vida y se dedicó a dar charlas sobre motivación y humor y escribir una decena de libros como "Teoría y práctica del humor" y "Ser feliz es fácil y divertido", lo que incluso le valió la nominación al Premio Nobel de la Paz 2012, que ganó la Unión Europea.
Moreno, quien se define como "un hombre que decidió volver a vivir" tras quedar parapléjico, es aficionado a la pintura, la natación, toca la guitarra y disfruta del canto.
De 63 años, casado y padre de tres hijas, acompañó a Correa en la vicepresidencia desde su asunción en el 2007 hasta el 2013 cuando su trabajo por las personas con discapacidad en Ecuador lo catapultó a Ginebra para desempeñarse como enviado especial del secretario de la ONU sobre Discapacidad y Accesibilidad.
Con su nuevo trabajo también llegaron furibundas críticas de la oposición y hasta una investigación de la Contraloría por su remuneración pagada por el Gobierno de Ecuador.
A fines del año pasado, el hombre de hablar pausado y sonrisa fácil, renunció a la ONU para aceptar el mandato de seguir la "revolución ciudadana" inaugurada por Correa.
Durante su campaña, acompañado de Jorge Glas, su candidato a vicepresidente, Moreno ha prometido luchar contra la corrupción, que ha salpicado a Correa en el corolario de su mandato.
GUILLERMO LASSO
Conocido por haber sido el presidente del Banco Guayaquil durante casi 20 años, muchos acusan a Lasso de haber estado vinculado al Gobierno de Jamil Mahuad, bajo cuyo mandato se desató la crisis financiera de 1999, que obligó a miles de sus compatriotas a emigrar en busca de oportunidades dejando atrás un país sumido en el desempleo y la inflación.
Sin embargo, Lasso se ha defendido asegurando que su institución fue de las pocas que no cerró sus puertas ni entró en proceso de rescate financiero del Estado.
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El hecho es que el empresario, nacido en Guayaquil hace 61 años, llevó a su banco a colarse como una de los más grandes de Ecuador y ser reconocido mundialmente por un proyecto de bancarización a microempresarios.
Lasso, el menor de 11 hermanos de una familia de clase media, estudió economía aunque nunca se recibió pero eso no le impidió lograr el éxito en el mundo financiero.
Con apenas 15 años, entró a la Bolsa de Valores de Guayaquil y luego fue escalando posiciones hasta llegar a una financiera que luego se fusionó con el Banco de Guayaquil.
Casado y con cinco hijos, Lasso tuvo también un breve paso por la filial local de Coca-Cola y el representante en Ecuador de Hino, una marca japonesa de camiones.
En el 2013 se postuló a las presidenciales, pero quedó en el segundo lugar muy por detrás de Correa, quien fue reelecto con más del doble de ventaja. El domingo, junto a Andrés Páez, su candidato a vicepresidente, Lasso espera quebrar esa racha.
"Ahora quiero emprender el reto de mi vida: lograr un Ecuador de oportunidades para todos", dice en su perfil de Twitter.
CYNTHIA VITERI
En las últimas semanas, Viteri ha subido en las encuestas hasta rozar, según algunas, el segundo lugar, con el que podría tentar un balotaje ante el candidato del Gobierno, Moreno.
Sin embargo, la carismática abogada, política y periodista de 51 años, no se confía ya que en las presidenciales del 2006, se quedó con las manos vacías, a pesar de haber estado en el pelotón de los tres primeros durante meses.
"Estoy en medio de dos grandes fuerzas, por un lado el poder político atropellando, y por otro lado, el poder económico con todo su dinero, y en medio, esta mujer a quien ustedes ya pusieron en segunda vuelta electoral", dijo en un reciente acto donde expuso sus propuestas enmarcadas en el libremercado.
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Casada y madre de cinco hijos, Viteri dejó el colegio a los 16 años tras quedar embarazada, aunque luego regresó para terminarlo.
Luego de graduarse en jurisprudencia, fue reportera y presentadora de noticias en Guayaquil, su ciudad natal.
Desde 1998 fue diputada del Congreso, al que renunció a fines del año pasado para dedicarse a su campaña electoral, convirtiéndose en la asambleísta con mayor tiempo en funciones.
Desde el hemiciclo se convirtió en una férrea crítica del presidente Correa e impulsó reformas de tipo penal.
El domingo, tendrá su segundo intento de llegar al palacio de Carondelet, esta vez acompañada por el economista quiteño Mauricio Pozo, en el binomio del Partido Social Cristiano.