Desde el 2014, el actual Gobierno ha estado trabajando en la Agenda Digital que plantea los lineamientos de la digitalización en nuestro país para los siguientes cinco años. Esta iniciativa avanzó hacia la formación de mesas de trabajo que reunieron a representantes del Gobierno, de empresas y de entidades públicas y privadas, entre quienes participamos como ACTI.

Sin embargo, hoy, ya a mediados del 2015, aún esperamos el lanzamiento de la Agenda Digital. Su realización atenderá problemáticas centrales donde la tecnología genera valor para el país y, en particular para sus ciudadanos, impactándolos positivamente a través de un acceso más igualitario a la información, a la formación de las personas, a servicios básicos como la salud, transporte, la educación, gestión de sus empresas y acceso a mejores ocupaciones,  entre otros factores.

Nos urge además porque el país necesita crecer y acercarnos a una senda de desarrollo,  que sin una visión compartida en aspectos claves como los contenidos en la Agenda Digital, nos tomará más tiempo del proyectado. Sabemos que al respecto el país se está quedando atrás, porque aunque tengamos internet en el teléfono, dispositivos modernos y un buen avance en comparación a nuestros vecinos, el camino es largo aún y la tecnología no se ha incorporado lo suficiente a la economía, a la modernización del Estado y a la conectividad regional y humana.

Es por ello que el estancamiento en la decisión de llevar a cabo esta agenda nos hace temer una falta de compromiso con estas tareas y una poca importancia otorgada a las TIC y a la digitalización del país. Y si bien, entidades de Gobierno como las subsecretarías de Economía y de Telecomunicaciones, así como la Secretaria General de la Presidencia , han mostrado buenas intenciones, este proyecto hoy no tiene la prioridad del Gobierno.

*Secretario General de ACTI