Al interior de BTG Pactual sólo se ven sonrisas. El área de finanzas corporativas cerró un 2017 en cifras récords, tanto en transacciones como en ingresos. En total, el banco de inversión participó en 16 operaciones de equity (IPO, bloque accionarios y OPA) y otras cuatro de fusiones y adquisiciones (F&A), algunas de las cuales los mantuvo en el centro de la noticia, como fue la venta del Canal del Fútbol (CDF).
Según el director de finanzas corporativas de la entidad, José Ignacio Zamorano, en sus dos principales productos, que son colocación de acciones y F&A, "nos fue extraordinariamente bien. Hubo 26 transacciones entre adquisiciones, aperturas a bolsa, aumentos de capital, bloques accionarios y OPA, de las cuales hicimos 16, es decir un 62% de participación de mercado. Este año fue extraordinario para nosotros".
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En términos de M&A, el ejecutivo explica que participaron en cuatro operaciones: Enel, Banmédica, el Canal del Fútbol y Gastronomía y Negocios. "Estamos extremadamente contentos, hubo mucha actividad, fue la vuelta al mercado de capitales, que estuvo bastante lento un par de años. Este 2018 ya ha habido dos transacciones, ahora estamos terminando la OPA de Banmédica, se viene la de Enel y terminamos recién la de Enjoy. Este es un mercado extremadamente competitivo, pero estamos muy optimistas", comenta Zamorano.
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Rafael Ribeiro, responsable de M&A Latam, explica que uno de los aspectos que marcó el 2017 fue que las transacciones entre chilenos son cada vez por menores montos, y la competencia de los fondos de Private Equity ha aumentado mucho. "Los fondos globales han entrado más en Chile, porque los empresarios locales están más abiertos a socios financieros. Y ahora con la dinámica del último gobierno, donde vieron alternativas para diversificar su portafolio de inversión, están más abiertos a recibir inversiones de fondos especializados", señala.
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¿Cómo se viene el 2018?
Con un IPSA al borde de llegar a los 6.000 puntos, el apetito de controladores de compañías e inversionistas por acudir a la bolsa se mantiene.
Pero a pesar de los múltiplos a los que transa la bolsa, aún existen variables que se deben consolidar. A juicio de Zamorano, se ha visto en el mercado la sensación de optimismo, pero no es suficiente: "Se debe traducir en que trimestre a trimestre los resultados de las compañías empiecen a mejorar".
"En los últimos años las empresas no se expandieron, estuvieron en un plan de estructuración de costos. La gran mayoría se apretó el cinturón a la nueva realidad macroeconómica de Chile y reestructuró sus deudas, aprovechando que las tasas estaban bajas. Cuando el país empiece a crecer ya no será necesario tener tasas tan bajas, y volverán a buscar equity", sostiene.
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En esa línea, explica que con el nuevo gobierno ya "se notó un cambio (de ánimo en los inversionistas), ya estamos conversando con gente que quiere hacer aumentos de capital".
Según el ejecutivo, los mandatos que tienen para este año cumplen con el mismo perfil de 2017: mezcla entre colocaciones de acciones y M&A. Pero, en particular, el ejecutivo apunta a un sector que seguirá la ruta de transacciones del año pasado: energía.
"Los precios a los cuales se financiaron los proyectos hace tres o cuatro años son muy distintos a los actuales, los bancos comerciales cerraron un poco la llave, y eso va a llevar en algún tiempo, cuando empiecen a hacer las amortizaciones, a subir un poco más los precios, pero no a los US$100 (el megawatt/hora). Muchos desarrolladores pequeños y medianos van a tener problemas, y ya están analizando qué hacer. Creo que gatillará una serie de ventas. No es normal que haya 40 o 50 jugadores en una industria, eso implica que en algún momento se tienen que consolidar", sostiene Zamorano.
A esto se suman otros fenómenos. Históricamente entre 60% y 70% de la propiedad de las compañías en Chile estaba en manos de un controlador, algo que empieza a cambiar. Así lo ven ambos ejecutivos, quienes explican que con las valorizaciones actuales, los empresarios han empezado a aceptar vender sus participaciones pues en términos de derechos políticos, tener un 62% versus un 60%, por ejemplo, no hace la diferencia.
Respecto de cómo seguirá el crecimiento de las compañías chilenas en la región, Ribeiro es claro: "Donde están acostumbrados, Perú y luego algo Colombia. Para México y Brasil tienen que tener tamaño".