El aumento de capital de la cascada sobre SQM ya está en cuenta regresiva. La capitalización -que tiene por objeto pagar un bono emitido por Oro Blanco de US$100 millones (en EEUU) y que vence en agosto- parte este 31 de marzo y el 1 de abril, con el inicio del período de opción preferente de Norte Grande (a capitalizarse con US$92 millones) y Oro Blanco (US$120 millones), respectivamente.

Sin embargo, y luego de que accionistas como las AFP y Moneda ya expresaran su oposición a la SVS con respecto a esta operación, principalmente por la coyuntura que pesa sobre las matrices de SQM y porque afirmaron desconocer, por parte de estas compañías, alternativas distintas al aumento de capital para cumplir con la obligación financiera; en el mercado ya proponen mecanismos distintos a la capitalización.

Ayer, Credicorp Capital emitió un informe denomionado "What is behind Oro Blanco's and Norte Grande's capital increase?" (¿Qué hay detrás de los aumentos de capital de Norte Grande y Oro Blanco?"), en el cual sugieren tres alternativas para satisfacer las necesidades de pago de la cascada, considerando, a juicio del research que "todavía hay incertidumbre debido a la resistencia presente en los accionistas minoritarios", además de  "las dudas en materia de gobierno corporativo y los asuntos legales" relativos a la cascada.


LAS TRES ALTERNATIVAS
La primera de las opciones que analizó Credicorp Capital como plan B a la capitalización de la cascada es la distribución de las ganancias retenidas de Pampa Calichera que alcanzan los US$308 millones en concepto de dividendo extraordinario.

Este desembolso, no obstante, estaría limitado por la caja de la compañía que asciende hasta los US$265 millones, según cifras a 2013, pues en caso de que Calichera requiera más que su caja estaría haciendo uso de sus activos.

Otra alternativa consiste en un préstamo por parte de Pampa a Oro Blanco. "Sin embargo, esta opción requiere la aprobación de la Junta Directiva de Oro Blanco, que simplemente se traduce en la aprobación de Julio Ponce, debido a su propiedad de 88% a través de Norte Grande", sostiene Credicorp.

La última alternativa de financiamiento sería una venta de acciones de Pampa Calichera -A, sin comprometer el control de la empresa ( 51% de Pampa Calichera ). "La venta de esas acciones podría proporcionar hasta US$566 millones, que se pueden utilizar para cubrir la amortización de bonos".

No obstante, frente a esta última opción, uno de los autores del informe, Felipe Lubiano, sostiene que "hay un descuento por iliquidez aplicado a esta venta y no está garantizado el interés de terceros por todo el ruido en el gobierno corporativo".

Por tanto, a juicio del analista, "en términos de rapidez, lo más conveniente es realizar un pago de un dividendo extraordinario".

No ocurriría lo mismo con las ventas que podría efectuar Pampa Calichera de las acciones de SQM, compañía que ya considerando las restricciones de control y obligaciones financieras, puede enajenar US$107,4 millones en títulos de la serie A de SQM (con la cual se eligen 7 de los 8 directores de la compañía) y hasta US$141,9 millones de la serie B, la más líquida.


¿QUÉ DICE EL RESTO?
Tanto las AFP como Moneda aún analizan los pasos a seguir de cara a esta operación. Sin embargo, cualquiera de estas opciones ya habían sido motivo de análisis, razón por la que persisten dudas sobre la necesidad de que la cascada financie la deuda de Oro Blanco mediante capitalizaciones que, eventualmente, podría terminar por diluirlos.