El ex fiscal que investigó el caso Caval, Luis Toledo, renunció hoy a su postulación como notario de San Fernando luego que el nuevo gobierno de Sebastián Piñera anunciara ayer que paralizaría su polémica nominación.
A través de un oficio enviado a Contraloría, Toledo manifestó que "si bien cumplo con todos los requisitos legales y reglamentarios para acceder al cargo público notarial en el que fui nombrado y al que postulé en enero de 2017 (...), el mencionado nombramiento ha sido objeto de numerosos cuestionamientos públicos tanto por la forma en que fue tomada la decisión como por el momento u oportunidad en que éste ha recaído".
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Para Toledo los cuestionamientos del que ha sido objeto, "escapan a la esfera de mis actividades y afectan de manera injusta y desinformada, la honra del suscrito en materia personal y laboral".
En el escrito, el ex persecutor sostiene que su designación como notario, "me ha envuelto en una polémica de carácter político, injusta, gratuita, desinformada e interesada, que atribuyen un inexistente, espúreo y despreciable 'pago de servicios' sin especificación alguna que manchan mi honra funcionaria y desconocen la labor realizada en este caso".
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Luis Toledo expresó que su dimisión se concreta "esperando despejar con ello las mentiras y elucubraciones mañosas de quienes han pretendido instalar e involucrarme, tanto a mí como a la función pública que desarrollo".
