Johan Cruyff, el legendario delantero holandés de fútbol y entrenador, murió de cáncer de pulmón a los 68 años, según un mensaje publicado en su página web. Esta misma página recoge que Cruyff murió rodeado por sus amigos y su familia en Barcelona.

Como jugador, Cruyff era la encarnación del fútbol total holandés, un estilo de juego fluido que se centraba en la posesión del balón y el paso rápido, y la participación de todos los miembros del equipo tanto en ataque como en defensa. Emergió como uno de los grandes a nivel mundial en la década de los 70, cuando ayudó al Ajax Amsterdam a ganar tres Copas de Europa consecutivas, de 1971 a 1973, y fue nombrado Jugador Europeo en 1971, 1973 y 1974.

Fue fichado por el Barça por la cifra récord, por aquel entonces, de 2 millones de dólares. Fue este equipo que marcó para siempre su carrera de entrenador, pues Cruyff condujo al F.C. Barcelona  a obtener su primer título de la Liga en 15 años en 1974.

También fue un jugador clave en el gran equipo de Holanda que llegó a la final Mundial de 1974, cuando la audiencia de todo el mundo le vio jugar el famoso giro de Cruyff, en el que el jugador intenta engañar a un defensor enganchando la pelota detrás de su propia pierna antes de desviarse en la dirección de la pelota.

Cruyff había sido un fumador empedernido, y tuvo que operarse de corazón en 1991. Su fallecimiento se produce menos de seis meses después de que anunciara que había sido diagnosticado con cáncer de pulmón.