El triunfo de la formación antisistema Movimiento 5 Estrellas en los comicios del domingo en Italia ha despertado tantas esperanzas en el sur de la península que cientos de personas se han presentado en oficinas públicas a cobrar la prometida y soñada 'renta de ciudadanía'.
En algunas localidades del sur, tanto de Apulia como de Sicilia, donde el movimiento antisistema arrasó, llegando en algunas ciudades a obtener más del 60% de los sufragios, se formaron colas para pedir información sobre la medida estrella del programa M5E.
[ze_adv position="adv_300x100" ]
"A todos aquellos que vinieron a pedir los formularios hemos dado una respuesta técnica diciendo que, por el momento, ninguna medida ha sido tomada para ello", explicó un funcionario de una de las oficinas para la compilación de impuestos de Bari (Apulia), citado por el diario La Repubblica.
Unas 50 personas, entre 30 y 45 años, se acercaron a la oficina para pedir informaciones, contó el funcionario.
"No tenemos formularios para la renta de ciudadanía", rezaba este viernes un cartel en Palermo, la capital de Sicilia.
La formación antisistema, introdujo en su programa económico la renta mínima de ciudadanía para todos los adultos desempleados que viven por debajo del umbral de pobreza.
Se trataría de un sueldo de 780 euros al mes (por persona) y de 3.000 euros para una pareja con cinco hijos.
Ese sueldo está sujeto a varias condiciones, como la búsqueda de trabajo, cursos de capacitación y la obligación de aceptar una de las tres ofertas de trabajo recibidas. De lo contrario, la renta será suprimida.
Fuertemente criticada por los demás partidos políticos, tildada de prima a la inactividad o incluso a la pereza, existe en numerosos países del norte de Europa como subsidio.
Según varias estimaciones publicadas por la prensa, costaría al Estado italiano unos 15.000 millones de euros al año y afectaría su déficit, siendo uno de los países más endeudados del mundo.
Cinco días después de las elecciones legislativas del 4 de marzo, no se conocen aún los resultados definitivos debido a una ley electoral extremadamente complicada.
La coalición de centroderecha, con la Liga Norte que supera a Forza Italia de Silvio Berlusconi, ganaría las elecciones con un 37 %, seguida por el Movimiento 5 Estrellas (M5S) que se convierte en el partido más votado con más del 32 %, pero ninguno de los dos alcanzaría la mayoría necesaria en el Parlamento para gobernar.
La coalición de centro-izquierda obtendría casi el 23% de los sufragios con el Partido Democrático(PD) por debajo del 20%.