En Chile estalló el caso Penta y las dudas sobre el financiamiento de la política. Con su experiencia en Estados Unidos, ¿existe un sistema más eficiente, más transparente para recaudar dinero hacia los candidatos y partidos?

- Es esencial introducir una reforma muy profunda. Pero profundo no es lo mismo que apresurado. Algunas de las preguntas que hay que enfrentar  son éstas: ¿debe permitirse a las personas jurídicas aportar a la política, directa o indirectamente? ¿Por ejemplo, una asociación de discapacitados puede apoyar con dinero a candidatos que impulsan legislación que ayude a estas personas? ¿O, se debe permitir que la Sociedad de Amigos el Arte apoye a candidatos que promueven la construcción de nuevos museos? En muchos países estas actividades están permitidas, son consideradas una manifestación del derecho de libre expresión. ¿Y si estas instituciones pueden aportar, por qué  no las empresas?

¿Es correcto que las donaciones políticas cuenten, al final del día, con deducciones de impuestos?

- ¿Si las empresas, deben tener un beneficio fiscal? Aquí, creo, que la respuesta es un no rotundo. Y agrego más dudas a reponder: ¿debe haber límites a los aportes? ¿Y estos límites deben ser por candidato, o por donante?  ¿Y, deben de ser transparentes o reservados?

¿Es necesario contar con un sistema de financiamiento de la política, cuando  es  "mal visto" por la ciudadanía?

- Creo que las bases de un sistema saludable son éstas: aportes estatales a los partidos a un nivel básico; eliminación de todo beneficio fiscal; eliminación de aportes reservados; límites de donaciones, tanto a cada candidato como el total que cada donante puede entregar. Permitir donar a las personas jurídicas también, con límites y total transparencia.

Presidenciales

En otro plano, se ha empezado a señalar que Ricardo Lagos podría volver a ser candidato presidencial, ¿qué le parece? El respondió que había "que mirar el carné".


- Ricardo Lagos ha sido uno de los mejores presidentes en la historia de Chile. Un Presidente que le devolvió la dignidad al país, que entendió tempranamente que el desafío era crear un país moderno, que ideó y puso en marcha un exitosísimo sistema de infraestructura. No sé qué edad tenga Ricardo Lagos, pero lo veo con muy buena salud y gran vigor. Sería un candidato estupendo. 

¿Cómo ve a la derecha en este plano, ha logrado encontrar un referente?

- La derecha desapareció. La busco y no la encuentro. Desapareció bajo el peso de su conservadurismo, y su incapacidad de entender que Pinochet es un enorme lastre ético y estético. Chile necesita una derecha moderna, y hay jóvenes muy promisorios, pero para que ese sector vuelva a tener relevancia es necesario que los viejos tercios den un paso a lado.

¿Ve a Piñera con posibilidades reales de volver a La Moneda considerando su alejamiento de los partidos?

- Sumando y restando, Sebastián Piñera fue un buen Presidente. Un poco tímido, pero bueno. Por ahora su nombre es el único con cierta proyección. Pero yo creo, firmemente, que la derecha necesita catapultar a otra generación, a aquellos que apenas llegan a los 40 años.

Y lo último, más personal ¿ha pensado en volver a Chile y formar parte del Banco Central?

- Yo vivo en California, y aquí están mi familia, mis amigos y mi trabajo. Me encanta visitar Chile, pero eso es todo. Seguiré en el Pacífico norte.P