La guerra entre el comando de Sebastián Piñera y el Gobierno de Michelle Bachelet está declarada. A medida que se acerca la segunda vuelta los roces entre los bandos siguen escalando.

Durante la última semana los conflictos se han centrado en las acusaciones de intervencionismo que han surgido desde la oposición y los cruces verbales se intensificaron durante la jornada de ayer.

Tras una serie de cuestionamientos por parte del comando de Sebastián Piñera, la vocera de Gobierno, Paula Narváez, aseguró que los dichos provenientes del equipo del ex Presidente son parte de una táctica más amplia.

"Pareciera ser que esto forma parte de la segunda fase de la estrategia de campaña de Chile Vamos", manifestó Narváez, quien aclaró que la primera etapa había tenido que ver con la "decisión que tomaron de atacar al Gobierno de la Presidenta de la Presidenta Bachelet de distintas maneras, atacando directamente las políticas públicas, atacando las iniciativas del Gobierno".

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La ministra afirmó que esta "segunda fase" centrada en el intervencionismo electoral tiene como objetivo poder reflotar la polémica que comenzó el lunes de la semana pasada cuando Alejandro Guillier visitó a la jefa de Estado en La Moneda.

Campaña contra el intervencionismo

Los dichos de Narváez respondieron, fundamentalmente, al anuncio que había realizado un grupo de voceros del comando de Piñera durante la mañana de ayer.

Con el Palacio de La Moneda como telón de fondo, los diputados Felipe Ward, Marcela Sabat, Juan Antonio Coloma y Paulina Núñez lanzaron una campaña "contra las malas prácticas y el intervencionismo electoral".

"La casa matriz del intervencionismo está detrás nuestro", planteó Ward apuntando justamente a Palacio y a Narváez como quien ha encabezado un "grosero y evidente intervencionismo electoral".

El parlamentario explicó que la campaña apunta a que los ciudadanos "colaboren en la entrega de información" y con ese fin se instalarán buzones para que se realicen denuncias ciudadanas en todas las intendencias del país "para que se reciba esta información y encausarla a la Contraloría".

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"Si la Presidenta de la República va a ser la jefa de la barra y si la ministra Narváez se va a transformar en la vocera del candidato presidencial, que todo Chile lo sepa, lo castigue y lo denuncie", agregó Núñez.

La presencia de los legisladores en el frontis de La Moneda no pasó desapercibida y el diputado Giorgio Jackson (RD) los criticó desde el Congreso en Valparaíso.

"Ahora entiendo por qué no los veo en sus asientos en la sesión de la Cámara de Diputados. Reclaman "intervención" del Ejecutivo por tener preferencia, mientras en su tiempo de representantes están haciendo campaña por Piñera", escribió en su cuenta de Twitter.

Por su parte, la Presidenta Bachelet no se refirió a los cuestionamientos, pero sí llamó a "tener ojo" con las promesas que hagan los candidatos en este período. "Hay que prometer lo que uno sabe que va a cumplir, porque a veces por ganarse un votito más se juega con las expectativas de la gente", manifestó.

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Además, insistió en su llamado a votar el próximo 17 de diciembre y volvió a defender su legado. "Hay que participar con ganas porque hemos hecho cambios importantes que se notan", afirmó.