NII Holdings, matriz de los operadores de Nextel en Latinoamérica, vendió Nextel México a AT&T por US$1.875 millones, menos la deuda pendiente neta de la empresa al cierre de la operación.

La transacción, que si bien está sujeta a la aprobación de la Corte de Bancarrota del Distrito del Sur de Nueva York, donde NII Holdings se acogió al Capítulo 11 durante septiembre de 2014, y los organismos de competencia en México y Estados Unidos, se espera que sea concretada a mediados de 2015.

El CEO de NII Holdings, Steve Shindler, CEO de NII Holdings, afirmó tras anunciar el acuerdo de venta que la operación “con AT&T asegura a los clientes de Nextel México ser atendidos por una compañía de alta calidad, comprometida a ofrecer productos innovadores, servicios y soluciones”. y agregó que “creemos que la de venta de Nextel México representa una oportunidad para reducir nuestro riesgo de operación y entregar valor a nuestro accionistas, así como tener liquidez, lo cual nos ayudará a emerger del Capítulo 12 y poder fondear nuestro plan de negocio en Brasil”.

De las cinco operaciones que la compañía construyó en América Latina sólo queda Brasil y Argentina, tras vender Nextel Chile a inversionistas locales y argentinos y Nextel Perú a Entel Chile. Con esto NII Holdings, dirige su foco en la operación brasileña, mientras que busca vender los activos que mantiene en Argentina.

Por su parte, el mercado de telecomunicaciones de México está dividido entre América Móvil, del magnate Carlos Slim, con un 70% de participación, y Telefónica, con casi el 20%.

Medios locales señalaron que  para  la industria de telefonía móvil de México, la venta de Nextel implica que desaparece un operador y se fortalece AT&T e indican que el principal afectado de esta compra será Telefónica.

Esto debido a que deberá hacer frente no sólo a Telcel, de América Móvil, sino también a uno de los mayores operadores de telecomunicaciones de EEUU, considerando que ambos cuentan, al igual que Telefónica, con economías de escala y músculo financiero.