Desde hoy, la caja de compensación La Araucana entra en la parte más compleja de su proceso de reestructuración. Para las 11 horas de hoy esta citada la reunión con el comité de acreedores - conformado por LarrainVial, Banco de Chile, Santander y BCI- , instancia con la cual la entidad intervenida debe alcanzar un acuerdo para renegociar los más de $425 mil millones que adeuda.
El pasado 23 de diciembre la caja propuso reestructurar los $236 mil millones de acreencias bancarias y los $189 mil millones en bonos mediante un canje de deuda por un único bono de una sola serie, el cual será respaldado por la cartera de crédito.
La Araucana ofreció a los acreedores un papel a 10 años que amortiza trimestralmente capital e intereses a una tasa nominal de 7%; sin embargo, aún se desconoce si los acreedores exigirán un interés mayor. Se suma que existen diferencias entre éstos debido a que algunos buscarían la emisión de dos series, una amortizable y otra que pagaría el capital al término de la deuda. Ésta última es la que más acomodaría a los bonistas actuales, pues les permitiría dar más liquidez al nuevo instrumento y salir a venderlo al mercado, mientras que la banca exigiría pagos recurrentes.
Pero entre muchos bonistas también existen dudas respecto a lo que están impulsando los bancos. Esto porque persisten las versiones respecto de que insistirían en una fusión con una entidad como Los Héroes, a pesar de que la propuesta presentada por La Araucana fue validada por un informe de Econsult.
Entre muchos bonistas se especula con la necesidad de Los Héroes por renegociar sus pasivos, caja en la que BancoEstado y Banco de Chile son los dos mayores acreedores con péstamos de $27.500 millones y $26.304 millones, respectivamente. Así, el flujo de caja que presenta La Araucana podría apuntalar la situación de la primera entidad, algo que para los bancos significaría “matar dos pájaros de un tiro”.
En esa línea, no pocos apuntan también al doble rol que está cumpliendo la entidad controlada por Citi y el grupo Luksic, en relación a que está entre los mayores acreedores como banco, pero a la vez es el representante de los tenedores de bonos.
Los plazos
Varias semanas quedan por delante para definir la fórmula final de la reestructuración.
El comité de acreedores tiene plazo hasta el próximo 27 de febrero para redactar un acuerdo con la caja, el que debe ser presentado en tribunales dos días después para que el 10 de marzo se vote en la junta de acreedores.
Clave para este proceso fue el informe presentado por Econsult.
El estudio -preparado por Andrés Reinstein- proyecta que en el escenario propuesto, la caja podría pagar al menos la mitad de sus deudas en cinco años.
Sin embargo, este modelo implicará que el stock de colocaciones de $449 mil millones que alcanzó durante 2015, baje a $316 mil millones para 2025. Es decir, una disminución de 29,5%.
De hecho, éste es uno de los aspectos clave del proceso de amortización. La reducción de la cartera significará que la deuda total de la caja pasará de los $436 mil millones de 2015 a $226 mil millones en 2020.
A la vez, tras pérdidas en el ejercicio pasado equivalentes al 5,4% de las colocaciones, se espera que la caja obtenga utilidades en 2016 por $18.546 millones (2,6% sobre la cartera de colocaciones), para llegar en 2025 a un 2% ($6.252 millones).
Además de proyectar menores créditos, también cambiarán algunos de sus aspectos centrales. El capítulo “Modelación Camadas Nuevas” del informe, detalla que la tasa de interés de los créditos subirá desde 1,9% mensual a 2% -ya trepó en enero-, a lo que se suma la reducción del número de cuotas desde 60 a 36 meses.