El proyecto de ley de identidad de género sigue generando diferencias al interior de Chile Vamos. Luego del triunfo de "Una mujer fantástica" en los premios Oscar como mejor película extranjera, el debate sobre esta iniciativa ya se instaló al interior del futuro gobierno a días de que asuma en La Moneda.
El futuro ministro de la Secretaría General de Gobierno (Segpres), Gonzalo Blumel, afirmó ayer en entrevista con radio Duna, que "hay una necesidad de legislar en esta materia, sobre todo porque el cambio de género registral es engorroso y no está a la altura de lo que Chile necesita". El proyecto actualmente se encuentra en su tercer trámite constitucional en el Senado y será probablemente Blumel quien a partir de la próxima semana tenga que decidir si acelerar o no la última etapa de su legislación.
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Por eso las palabras del futuro ministro recibieron un primer freno en la UDI. La presidenta del partido, Jacqueline van Rysselberghe, afirmó que el proyecto del Gobierno "es muy malo" y tomó distancia de Blumel respecto de la urgencia que debiese tener este tema. "Más allá del Oscar, a Sebastián Piñera lo eligieron para resolver los problemas cotidianos, por lo tanto, independiente de que se pueda avanzar en este proyecto, lo que no puede pasar es que aquellas cosas que son prioritarias como la salud, la educación, la seguridad ciudadana, la reactivación de la economía, queden en un segundo plano", dijo van Rysselberghe.
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Su par de RN, Cristián Monckeberg, también coincidió con la líder gremialista en que se trata de una iniciativa deficiente y agregó que en el bloque "hay disposición absoluta a mejorarlo y sacarlo adelante". Monckeberg, que a partir de la próxima semana debutará como ministro de Vivienda, dijo que el proyecto debe seguir debatiéndose este año ya que "pasar este año 2018 sin discutir este proyecto sería malo".
Las objeciones de Chile Vamos apuntan principalmente a los requisitos para que una persona transgénero pueda cambiar su nombre y sexo registral. Es en este punto, aseguraron en la oposición, en donde hay más diferencias debido a que el estado actual del proyecto estipula que cualquier persona mayor de edad puede realizar ese procedimiento sin la necesidad de presentar nada extra más que su voluntad.
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Con todo, esta iniciativa legal pone en evidencia que los temas valóricos son el punto débil de Chile Vamos. Esto porque en la coalición decretaron libertad de acción para estos asuntos produciendo una serie de divisiones y traspiés con los que han tenido que saber lidiar.
Un ejemplo de esto es la posición que ha asumido Evópoli. El partido ha votado a favor del proyecto en ocasiones en que el resto del bloque rechazó. Por eso ayer el presidente de la colectividad, Francisco Undurraga, volvió a reafirmar que están a favor del texto legal y que esperan pueda ser tramitado a la brevedad. "Es del todo conocido que nosotros lo hemos apoyado (...) Lo menos importante es que la película haya ganado un Oscar, aquí lo importante es darle solución a las personas que se sienten desvalidas y que sienten la necesidad de estar protegidas por esta ley", dijo el dirigente.
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Evópoli, a través del diputado Felipe Kast, se ha manifestado abiertamente a favor del proyecto con la excepción de que han rechazado que incluya a menores de edad.
Ayer el senador RN, Andrés Allamand, dijo que el proyecto "está bastante avanzado" y reconoció que ya existe bastante consenso al respecto. "Es una legislación que debiera salir en forma rápida", dijo el parlamentario a T13 radio.
La última ofensiva de Bachelet
Ya es casi un hecho que el proyecto no se despachará durante el Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet y tendrá que ser el futuro mandatario Sebastián Piñera quien deba hacerse cargo. Sin embargo, ayer la ministra vocera de Gobierno, Paula Narvaéz, aseguró que "como Ejecutivo estamos haciendo todos los esfuerzos para que esta semana podamos concluir ese tercer trámite constitucional que significa que lo aprobado tiene que ser visto ahora en el Senado. Y para que eso ocurra la Secretaría General de la Presidencia se encuentra realizando la interlocución con el Congreso".
Pero hasta el momento, la comisión de Derechos Humanos del Senado, que preside van Rysselberghe, no tiene ninguna citación esta semana. Para que el proyecto pueda continuar su tramitación debe ser visto por esta comisión ya que fue la que recibió el proyecto con las modificaciones sufridas durante su paso por la Cámara.
Consultada ayer sobre la posibilidad de que la comisión sea citada durante estos días, Van Rysselberghe afirmó que no está en agenda. Ayer, hasta el cierre de esta edición, el Ejecutivo tampoco había ingresado ningún tipo de urgencia al proyecto, sin embargo desde la Segpres no descartaron que hoy Bachelet pueda ingresar una para acelerar la tramitación. Por su parte, el diputado DC, Matías Walker, pidió agilizar el trámite final de esta iniciativa legal.
En caso de que eso ocurra, conocedores del proyecto afirmaron que lo más probable es que se tenga que convocar a una Comisión Mixta por lo que Piñera recibirá la iniciativa en su última etapa y a punto de poder promulgarla.
Desde Chile Vamos miran con expectación el rol que puedan jugar los futuros ministros Gonzalo Blumel y Cecilia Pérez. Esto debido a que ambos son considerados como más liberales y porque Pérez, la semana pasada, confirmó que la Segegob, que presidirá desde el lunes, seguirá impulsado la agenda de diversidad sexual.
