Un difícil 2015 es el que proyectan los importadores de camiones en el país. Esto a raíz de la caída en las ventas ocurrida en el año pasado, que según explican, se arrastraría a este año también.
Hasta el momento, la Asociación Nacional Automotriz (ANAC) prevé que las ventas de este segmento estarán en torno a las 11 mil unidades, lo que implica una caída de 13,45% respecto a los 12.710 camiones que se comercializaron en 2014. Y, según explican conocedores, la comercialización de este tipo de vehículos recién podría remontar en el último trimestre.
“En este mercado, las principales variables tienen relación con el funcionamiento de las empresas, tanto las pymes como las grandes industrias del país, siendo gravitante el comportamiento de la inversión, la que habría registrado una contracción anual de 6%”, explicó la asociación en su informe de diciembre del año pasado.
Lo cierto es que la dependencia de la industria de los camiones con los ciclos económicos es muy grande. Sus principales sectores consumidores de este tipo de bienes son el transporte de carga, la minería, energía, la agricultura y la construcción.
“En este marco han sido importantes los proyectos de inversión postergados, paralizados o desistidos, donde alrededor del 61% corresponde al sector minería y 37% a energía, lo que sin lugar a dudas impacta directamente en la comercialización de vehículos pesados”, remató la ANAC.
No obstante esto, según comentan en la industria, no es algo completamente nuevo. En 2011, la comercialización de camiones llegó a su punto más alto en los últimos años con 18.585 unidades, lo cual fue cayendo, primero a 18.309 en 2012 y luego con más fuerza en 2013, en que se colocaron casi 4 mil camiones menos.
Eduardo Pastén, gerente de ventas de Volvo Camiones, explicó que si bien se ha tratado de un año complejo, la firma continúa creciendo en participación. “Volvo camiones logró ser la marca con mayores ventas de camiones pesados en noviembre y diciembre, logrando un aumento significativo de su participación de mercado en camiones pesados del 9,9% en 2013 a 11,7% en 2014 con un total de 800 camiones vendidos durante todo el año”.
En esa línea, la apuesta de Volvo es incorporar nuevos productos. Ejemplo de ello es la nueva línea de camiones que estará disponible en el primer bimestre de este año y cuya particularidad es la tecnología que incorpora una plataforma de transporte que, a través de su hiperconectividad, lograría aumentar la disponibilidad, productividad y eficiencia energética del negocio.
Del mismo modo, las firmas planean incorporar nuevos productos, mayores equipamientos y formar alianzas con sectores productivos para poder cumplir con sus metas.
No obstante, el mercado está siendo golpeado por otros elementos. Por un lado, el alza del dólar produce que las cuotas de financiamiento para las unidades suban por el mayor precio de los camiones. Y junto con ello, la banca y las instituciones financieras están solicitando un pie más alto en los leasing, de manera de bajar el riesgo. Es por ello que algunas marcas están generando estructuras o alianzas para incentivar los créditos para vehículos pesados.
Los más optimistas explican que la industria debería mejorar hacia final del año, tanto por un elemento de estacionalidad, como por el repunte de algunos sectores productivos. Adicionalmente, dado que el volumen del mercado se contrae y las apuestas están concentradas en el último cuarto del año, las apuestas de las principales marcas es mantener o aumentar sus participaciones.