Después de las turbulencias de la semana pasada, ante una escalada de las tensiones entre EEUU y China y miedos por una posible guerra comercial entre ambas potencias, el apetito por riesgo se ha ido recuperando en las última sesiones. Y eso se ha visto replicado en la bolsa local.
En línea con las principales plazas bursátiles del mundo, el IPSA se apreciaba este martes, firmemente encaminado a romper la racha negativa que lo ha tenido cinco sesiones consecutivas en números rojos. A las 13.00 horas, el selectivo subía 0,74% hasta los 5.486,98 puntos.
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Según comentan desde la rueda local, esto se ha visto inspirado, al igual que los últimos días, por la tónica internacional, donde se ven avances en las recuperaciones en Wall Street y las principales bolsas de Asia y Europa. En América Latina, el comportamiento es mixto, con bajas contenidas en Brasil y Colombia por el momento.
Además, una caída en los metales preciosos apoya la tesis de una mayor tranquilidad en los mercados financieros. Pasado el mediodía, el oro –activo refugio por excelencia– perdía un 0,8% de su valor, perdiendo el máximo de seis meses que encontró recientemente, mientras que la plata cedía un 1%.
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El índice VIX de volatilidad –que mide la turbulencia de los mercados en base a los futuros del S&P 500– profundizaba las caídas que registró ayer, aunque se mantenía sobre los 20 puntos, casi el doble del promedio de los últimos 12 meses.
El entusiasmo por renta variable no se tradujo a todos los activos de riesgo, como las monedas emergentes. Luego de avanzar en bloque frente al dólar, estas divisas cayeron durante la jornada de ayer, con la excepción del salto de 1% que dio el peso colombiano.
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