En el seminario de hoy de la Sofofa y la UDD, "Nuevos Vientos para la modernización del Estado", el futuro ministro de Economía, José Ramón Valente, le rayó la cancha a los empresarios en el marco de las líneas de acción encomendadas por el Presidente Piñera. En el encuentro, Valente contó que la primera misión encomendada por el Presidente electo fue consolidar una oficina para grandes proyectos.

Así, entre diciembre y enero sostuvo 53 reuniones con grandes compañías para sondear el estado de sus proyectos y tras los encuentros salía al tapete la dificultad de estas para navegar por la institucionalidad pública y destrabar sus proyectos.

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Pero por otra parte también advirtió problemas para impulsar la productividad por lo que se creara una oficina de productividad y competitividad. Punto que el ministerio aterrizará en una agenda reimpulso a la economía. Contó que en un primer diagnóstico hay 200 iniciativas pequeñas y multisectoriales que se llevarán a cabo y que permitirán borrar barreras de entrada, eliminar privilegios y hacer más competitiva la economía nacional.

En ese contexto, fue enfático en señal que "la labor del Estado no es favorecer directamente a los empresarios sino que crear las condiciones para que hayan muchos más empresarios y que estos se desarrollen en mercados más competitivos".

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El objetivo, aclaró, es "botar barreras de entradas de manera que los empresarios que hoy son incumbentes en sus industrias sientan la presión de los jóvenes y las nuevas empresas que los vienen a desafiar, y de esa manera innoven y ofrezcan buenos productos", dijo.