Juan Benavides aterrizó de lleno en una industria que enfrenta nuevamente una inminente reforma, algo que él reconoce como uno de los grandes desafíos que debe enfrentar a la cabeza de AFP Habitat. Ya han pasado siete meses desde que reemplazó a José Antonio Guzmán -uno de los ejecutivos más respetados y mediáticos de la industria- y en este tiempo, Benavides se ha concentrado en plasmar el sello de su gestión: que no sólo contempla el rol fiduciario sino también la educación previsional de sus afiliados. En este contexto, destaca que hoy existe consenso sobre los parámetros que deben ser modificados y advierte que propuestas como la incorporación de un beneficio definido dentro del pilar obligatorio sería regresivo, sobre todo para quienes menos ingresos reciben.

¿Cómo han sido sus primeros meses al mando de la AFP? Su gestión es diferente a la de su antecesor…
En esta primera etapa mi dedicación ha estado en plasmar la necesidad de complementar el rol fiduciario que se le reconoce públicamente a Habitat con un enfoque que permita acercar el sistema de pensiones a los afiliados desde una perspectiva educativa. Esto significa profundizar la cercanía, lo que implica no sólo la cobertura de Habitat a nivel nacional, sino también establecer una comunicación empática y de contenido educativo. El objetivo de esto es apoyar a los afiliados para que a través del pilar obligatorio y voluntario puedan pensionarse acorde a sus expectativas.

¿Cuáles han sido los mayores desafíos?
El mayor desafío ha sido incorporarse a una industria que enfrenta incertidumbre regulatoria, por lo tanto es importante que desde la industria continuemos con el trabajo que permita desmitificar todos los conceptos errados o arbitrarios que hay en torno a las pensiones, de manera de educar a los afiliados y romper paradigmas.

Hoy se dice con mucha libertad -y sin ningún sentido de la responsabilidad política- que la pensión promedio es de $180 mil al mes, siendo que en ese número están quienes cotizan regularmente y disciplinadamente mes a mes con quienes cotizaron en la AFP por una vez en su vida para alcanzar los beneficios derivados del pilar solidario, lo que obviamente deforma la realidad en forma preocupante. Ese número está totalmente distorsionado y la industria y las autoridades deben ser capaces de instalar los números reales que permitan revalorar el sistema.

¿Cuáles son los factores que más le preocupan de la discusión previsional?
Mi mayor preocupación respecto de la discusión previsional es que ésta está muy influenciada por ideologías, la presión programática y campañas de desinformación. Sabemos que existe una voluntad de parte de todos de mejorar el sistema y la industria ha contribuido con propuestas técnicas, que de implementarse, aseguran resolver las insuficiencias que han sido transversalmente identificadas y reconocidas por expertos nacionales y extranjeros. El diagnóstico de cómo perfeccionar el sistema de pensiones ha sido validado por todos los eslabones que componen la cadena, incluidas las propias administradoras de fondos, y Habitat en particular.

¿Qué rol le corresponde asumir a la industria en esta nueva reforma?
Las AFP somos un eslabón fundamental del sistema de pensiones chileno, ya que la capitalización individual les asegura a las personas que el ahorro acumulado con su esfuerzo a lo largo de los años se verá traducido en su jubilación futura.

Sin embargo, el sector ha sido sometido permanentemente a una fuerte presión, pero sin tomarse las medidas necesarias. En el 70% de los países OCDE, los cambios demográficos, la rentabilidad de los fondos y los vacíos del mercado laboral fueron abordados a través de decisiones políticas que en Chile no pueden seguir postergándose.

Las propuestas que hizo Habitat ante la Comisión Bravo no son compartidas por el resto de la industria ¿Por qué?
Nosotros hicimos una serie de propuestas a la Comisión Bravo que creemos contribuyen de manera técnica y seria a mejorar las pensiones de los chilenos. Lo que importa acá es que, más allá de quién propuso tal o cual medida, las autoridades políticas y parlamentarias no posterguen por razones de beneficio electoral el generar un nuevo marco regulatorio que considera aquellas medidas que apuntan al corazón del problema, que es cómo aumentar las pensiones de los chilenos.

¿Considera que incorporar un componente de beneficio definido dentro del pilar de contribución obligatoria sería un cambio positivo?
Tenemos serias dudas de cómo se implementaría ese mecanismo, porque si la incorporación de un componente de beneficio definido dentro del pilar de contribución obligatoria significa solidarizar parte de la cotización, no estamos de acuerdo. Actualmente en Chile existe un tope imponible para las altas rentas. En este sentido, la solidarización de una parte de la cotización es altamente regresiva, ya que los más pobres estarían contribuyendo proporcionalmente más a financiar las pensiones de los más ricos.

Nosotros creemos que las pensiones deben ser reflejo del esfuerzo que realizó una persona a lo largo de su vida laboral, y, si por diversas razones no le alcanzó para generar una buena pensión, es el Estado el que debe complementar el pilar solidario a través de recursos públicos, recaudados a través de impuestos generales.

El principal problema del retiro programado frente a la renta vitalicia es la evolución que tiene el monto de la pensión ¿De qué forma se podría mejorar esta modalidad de pensión?
Una de las propuestas que planteó AFP Habitat a la Comisión Bravo trata precisamente de hacer una mejoría al retiro programado, a través de la mutualización del retiro programado. Ésta consiste en que se comparta voluntariamente, entre grupos de pensionados, el riesgo de longevidad, logrando un aumento sustancial en el monto de las pensiones.  La medida significa sí renunciar a la herencia que actualmente deja el retiro programado.

Otra de nuestras propuestas que buscan minimizar el riesgo de longevidad de los pensionados es un seguro de longevidad. Esta propuesta la hemos analizado y compartido con autoridades y expertos en pensión, y lo que percibimos es que tiene buena acogida.

¿Cómo enfrentan el descontento de la ciudadanía?
Por supuesto que vemos con preocupación el descontento que tiene la ciudadanía con el sistema y, tal como señalé anteriormente, los mejores sistemas de pensiones de la OCDE han introducido cambios como respuesta a la problemática demográfica y lagunas previsionales. Actualmente la tasa de cotización de los chilenos es muy baja y se ubica por debajo de los estándares de los países OCDE. Si a eso le sumamos que las personas están viviendo más años y que el mercado laboral no es estable, el resultado son efectivamente pensiones que no tienen tranquilas a las personas y las AFP son sindicadas como las culpables.

La situación económica del país impacta directamente en la cotización previsional  ¿Considera que están las condiciones por parte del gobierno para retomar confianzas?
Creemos que es necesario que se recuperen las confianzas para que Chile pueda retomar la senda del crecimiento, necesario por lo demás para reducir la desigualdad. En este sentido, es importante que el gobierno muestre sensibilidad de largo plazo en productividad y competitividad sustentable, como también un marco legal y estabilidad legislativa.

¿Cómo evalúa la postergación del inicio de la cotización obligatoria de los independientes?
Vemos con preocupación los anuncios que ha hecho el gobierno respecto de postergar el ingreso obligatorio de los trabajadores independientes al sistema a partir de 2015, como quedó establecido en la reforma previsional de 2008.

Habrá que ver qué propuestas nuevas se harán para que independientes, pues la única forma de aumentar las jubilaciones es cotizando más durante la vida laboral activa.

Asociado: Benavides: Prudential "fortalece las credenciales de Habitat para consolidarse como un player regional de pensiones"