TECNOLOGÍAS aplicadas a la vigilancia y al soporte de necesidades básicas, además de políticas públicas orientadas a la prevención situacional y un mayor número de "ojos en la calle", están entre las principales características de las ciudades más seguras del mundo.
Según el último reporte "Safe Cities Index" de la unidad de inteligencia de Economist Intelligence Unit (EIU), Tokio, Singapur, Osaka, Toronto y Melbourne son las cinco ciudades más avanzadas en materia de seguridad. Estás destacaron en los indicadores de permeabilidad digital, personal, de infraestructura y de asistencia médica. Cada urbe fue estudiada en relación a estas variables, aunque también consideraron otras, como la polución atmosférica.
[ze_adv position="adv_300x100" ]
Tokio es una ciudad en cuya área metropolitana habitan unos 13,7 millones de personas. Esta urbe se destaca en varios aspectos en materia de seguridad, pero uno de los más importantes es su fortaleza en materia digital. Según el análisis, obtuvo un puntaje de 88,40 en un listado donde Yakarta (Indonesia) quedó en el último lugar. Santiago no figura en la muestra.
De acuerdo a los expertos de EIU, la capital de Japón destaca en materia de seguridad digital debido a los planes y proyectos desarrollados en el marco de su preparación para albergar los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
[ze_adv position="adv_300x250-A" ]
En materia de seguridad asociada al mundo de la salud, es otra ciudad japonesa quien destaca: Osaka. Esta cuenta con un puntaje de 87,15 en una muestra que deja en último lugar a Karachi, la urbe más poblada de Pakistán. En cuanto a seguridad desde el punto de vista de la infraestructura, es Singapur quien destaca. Este núcleo urbano obtuvo un puntaje de 97,05 frente a los 38,42 de Daca (Bangladesh).
Desde el punto de vista de la seguridad personal -capítulo que está orientado hacia la posibilidad de ocurrencia de daños físicos producto de atentados u otros actos que quiebren la calma de la población-, es Singapur quien lidera nuevamente el listado. Esta urbe obtiene un puntaje de 94,94, mientras que Caracas se ubica en el penúltimo lugar con 47.36.
[ze_adv position="adv_300x250-B" ]
El informe que considera el estudio de 60 ciudades, dejó a Santiago en el lugar 35 del ranking a nivel global. Este destaca que en la capital de Chile descendió la tasa de accidentes de tránsito a menos de 5 mil por cada millón de habitantes. A nivel latinoamericano, Buenos Aires es la más segura.
Casos de éxito
A principios de los '90, un simple paseo por las calles de Nueva York podía terminar con un resultado violento, pues en esa ajetreada urbe existía una alta tasa de criminalidad, vandalismo y corrupción por parte de las policías. Esto, hasta que en 1993 asumió Rudolph Giuliani como alcalde de esa ciudad.
La nueva autoridad aplicó inmediatamente un plan de tolerancia cero, el que se enfocó tanto en delitos menores como en aquellos de alta connotación social. Además, aplicó una política de mano dura contra el crimen organizado, que por esos días azotaba sin tregua a las calles de "La Gran Manzana". Este plan se tradujo en una caída de 65,3% en los asesinatos que se produjeron entre el año que asumió y 2001, fecha en que dejó el cargo.
[ze_adv position="adv_300x250-C-net" ]
Entre otras medidas, una de las más destacadas fue el aumento del capital humano de las policías de Nueva York. Por ejemplo, sólo entre 1990 y 2000 esta cifra creció un 35%.
Luego de que terminara el periodo de Giuliani, Nueva York siguió mejorando sus cifras. Según datos oficiales, durante 2017 en esa ciudad se produjeron 290 homicidios, lo que es considerado el número más bajo desde 1951. Si se comparan estos resultados con los de 2016, se revela una caída de 13,5%. Esto se traduce en una tasa de 3,4 muertes violentas cada 100.000 residentes. En 1990 era 30,7 por igual número de personas.
La experiencia de Nueva York no es la única en materia de iniciativas y políticas que buscan mejorar la seguridad de las urbes, algunas ciudades de Colombia experimentaron un fuerte cambio en los últimos años. Mayor presencia policial, aplicación de nuevas tecnologías y una fuerte campaña comunicacional, están entre las principales razones que cambiaron su panorama.
Pero esto no fue sencillo, este país venía de una escalada de violencia sin precedentes. Por ejemplo, en 1985 se produjeron 8.565 homicidios en su territorio, mientras que en 2002 esa cifra creció a 28.837, lo que representa un avance de 236%, según consigna un reporte de la Policía Nacional. Pero gracias a un giro en la mentalidad de sus autoridades, que apostaron por la prevención y aplicación de duras medidas de contención, se logró combatir el problema de raíz.
Esto se tradujo que en 2017 se registrara la tasa de homicidios más baja en 30 años. De esta manera, se produjeron 24 muertes cada 100.000 habitantes. Además, 310 municipios del país se mantuvieron totalmente libres de fallecidos.
Por ejemplo, Bogotá presentó en 2017 el menor número de homicidios desde 1985 y una disminución de 12% respecto a 2016. Esto representa una tasa de 14 casos cada 100.000 habitantes.
En tanto, Cali registró 1.228 muertes violentas durante 2017. Esta cifra equivale a unos 71 casos menos que los ocurridos durante 2016, una caída de 5,46 %. Esto, según cifras entregadas por las autoridades colombianas.