Pese a que las cosas se han visto un poco negras recientemente para los mercados accionarios en general y el sector tecnológico en particular, el debut bursátil de Spotify Technology arrojó resultados positivos.

Después de que la sueca dedicada a la música por streaming concretara hoy su apertura en bolsa, sus papeles registraron un potente debut bursátil el martes con un precio de US$165,90, muy por encima del que tuvieron los papeles en operaciones en mercados privados en los últimos días.

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Así, las acciones abrieron un 25% por encima del precio referencial de US$132 que se fijó por la Bolsa de Nueva York (NYSE, por sus siglas en inglés).

Aún está por ver si mantiene esos niveles durante la jornada, sin embargo. La compañía sueca escogió una ruta poco habitual para salir al mercado, obviando a los bancos colocadores que ayudarían a estabilizar su precio tras su lanzamiento.

Su primer día de operaciones, ayer, coincidió con una fuerte liquidación en los valores tecnológicos en particular, pero el mercado presentaba un paso más firme hoy.

NYSE fijó el precio de referencia de Spotify anoche, aportando una estimación temprana del nivel en el que podrían estar equilibradas la oferta y la demanda. Esta cifra estuvo en línea con las operaciones informales del lunes, con las acciones cambiando de manos con cotizaciones en torno a los US$132, lo que valoraba a la compañía en más de US$23.000 millones.

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En las últimas cifras conocidas, se hablaba de una salida a bolsa con un precio de entre US$167 y US$170 por papel.

Los próximos días, se espera que los ojos del mercado estén puestos sobre la cotización de los papeles de Spotify, mientras los inversionistas miran con temor que la historia del debut bursátil de Snap Inc, matriz de la red social Snapchat, se repita.

Y no es sólo la sombra de la apertura de Snap lo que levanta dudas entre los inversionistas. Las últimas semanas la bolsa estadounidense en general ha estado sujeta a accesos de volatilidad en la medida que han escalado las preocupaciones por una potencial guerra comercial entre EEUU y China ante crecientes tensiones.

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El sector tecnológico en particular ha estado sujeto a mayor presión de venta que el mercado general, luego de que el escándalo por uso de datos con fines políticos de Facebook y Cambridge Analytica levantara la posibilidad de una mayor regulación a compañías como Twitter.