LATAM publicó ayer las cifras del mejor año que ha vivido la compañía desde la fusión entre LAN y TAM. Sin embargo, aquello no fue suficiente para cumplir con las expectativas que guardaban los analistas del mercado.
La aerolínea informó que sus utilidades sumaron US$67 millones en el último trimestre de 2017, monto que representa un alza de 23,6% en relación al mismo período del año anterior. Sin embargo, la cifra es menor a los US$77 millones que estimó la mediana de los departamentos de estudios, según cálculos de Reuters. En el mismo período, los ingresos subieron 7,7%, alcanzando los US$2.768 millones. La cifra estuvo cerca de los US$2.737,5 millones que esperaba el mercado.
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En este escenario, el Ebitdar subió 11,7% en el trimestre, totalizando US$660 millones.
Con estos números, las utilidades anuales de la compañía se duplicaron a US$155 millones, mientras que las ventas crecieron 6,7% por US$10.164 millones para todo 2017. Se trata de los mayores montos en la historia de LATAM.
Los costos, en tanto, se mantuvieron acotados y creciendo a un ritmo menor. De hecho, en el año subieron 5,5% en relación a 2016, pese al alza de 21% en el precio de los combustibles.
Razones y perspectivas
Desde la aerolínea comentaron que el año pasado fue el primero, desde la fusión, en que se observó un repunte de la demanda. Según detalló el gerente de finanzas de LATAM Ramiro Alfonsín, se observó un mejor desempeño en todos los mercados.
Incluso en Brasil, donde esperan que el repunte continúe, en línea con la positiva visión que comenzaron a tener a partir del tercer trimestre de este año. Según Alfonsín, la compañía tiene buenas perspectivas para este mercado, impulsadas por el segmento corporativo. No obstante, son cautelosos a la espera de las elecciones presidenciales de octubre.
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Respecto a su plan de inversiones, aseguraron que mantienen una política de disciplina. Aquello, habría ayudado a la compañía a bajar su nivel de deuda.
