Latam Airlines sigue en racha. La aerolínea cerró por tercer trimestre consecutivo en cifras azules, al contabilizar ganancias por US$94 millones entre enero y marzo de este año, monto que representa un alza de 43,2% en relación al mismo período del año anterior. Las mayores ventas explican el buen desempeño.

En el mismo período, los ingresos subieron 10,2%, alcanzando los US$2.731 millones. En este escenario, el Ebitdar subió 11% en el trimestre, totalizando US$616 millones.

Las ventas no sólo habrían sido beneficiadas por el negocio de pasajeros, que aumentó en 10,1% en el trimestre. En el período se registró un alza en los ingresos de carga, manteniendo la tendencia positiva iniciada en el tercer trimestre del año pasado. En concreto, este ítem subió en 16,6%.

Los costos, en tanto, se elevaron 7,6%. Esto se explicaría, principalmente, por el alza en los costos en petróleo, que subieron en 20,6% en el período, que se vieron compensados por el menor gastos en salarios y beneficios del personal, ítem que bajó en 2%. De hecho, si se excluye el petróleo, el alza en los costos operacionales se eleva 3,1%, en línea con periodo anteriores.

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"El plan de transformación que estábamos abordando está produciendo los frutos que anticipábamos", explicó el gerente de finanzas de Latam, Ramiro Alfonsín en cuanto a los costos. Por el lado de las ventas, destacó que "en todas nuestras unidades de negocio, nuestros ingresos han mejorado, lo que es internacional, doméstico Brasil y países de habla hispana, y cargo que ha continuado mejorando". Y agrega: "Estamos viendo una demanda más sana, estamos viendo que la estabilidad macroeconómica en la región y las mejores perspectivas de crecimiento está traduciéndose en mayor demanda".

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El margen operacional de la compañía alcanzó un 8,4% durante el primer trimestre, lo que representa un alza de 2,3 puntos porcentuales en comparación al resultado del mismo trimestre de 2017.

En los resultados no está aún reflejado el impacto de la huelga.

Pronósticos.

A fines del año pasado, Latam por primera vez se mostró optimista respecto a Brasil. De hecho, la compañía ve un aumento de la capacidad en el mercado doméstico de ese país durante este año.

No obstante, Alfonsín señaló que "tenemos un Brasil con elecciones, lo que puede generar una ralentización de lo que es crecimiento y demanda. Por eso somos cautos con la capacidad en Brasil".