Tras 17 días de una huelga que provocó la paralización de la mayoría de las operaciones domésticas de Latam, el Sindicato de Tripulantes de Lan Express decidió la madrugada del día jueves poner fin a la medida.
Sin embargo, la fórmula escogida fue polémica. El sindicato, aludiendo a un artículo del nuevo Código del Trabajo, aceptó la última oferta presentada por la compañía, justo antes del inicio de la movilización. Esta, no obstante, no está vigente actualmente, según fuentes cercanas a Latam.
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La compañía calculó en un rango de entre US$1 millón y US$1,5 millones las pérdidas provocadas por la huelga, lo que suma un total de hasta US$25 millones.
Según explicaron fuentes del sindicato, la razón principal por la cual decidieron dar fin a la huelga tiene que ver con que en los últimos días, no se produjo ningún acercamiento. Este quiebre se produjo luego que los trabajadores rechazaran una oferta oficial de Latam presentada el pasado 20 de abril. Previo a ello, la dirigencia sindical había aceptado una propuesta de la empresa, pero las bases, en asamblea, la rechazaron. Entonces, la compañía informó que se había alcanzado un "acuerdo total", que finalmente no ocurrió.
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"Nosotros dimos por terminada la negociación. Era nuestro mejor escenario, porque ya llevábamos una semana intentando que ellos nos hablaran, pero no querían", explicó Silka Seitz a PULSO.
En esa línea, la dirigenta añadió que si no se tomaba una decisión, corrían el riesgo de que la empresa presentara una nueva oferta, lo que significaba que tendrían que esperar cinco días más para responder.
"Ahí tendríamos que haber estado en huelga hasta el miércoles y con gente descolgándose. Por eso, había que tomar una decisión ahora", dijo la dirigenta.
La reacción
Pese esto, desde la empresa no están convencidos que la fórmula escogida sea legal. Incluso más: la aerolínea, de manera oficial, señaló que bajo su interpretación esto no se ajustaría a la legislación vigente.
Por este motivo, "la compañía está haciendo una consulta a la Dirección del Trabajo (DT) para que se pronuncie sobre la legalidad de lo actuado por el sindicato", indicó Latam.
Por su parte, Ignacio Cueto presidente del directorio de Latam Airlines, agregó tras la celebración de la junta de accionistas de la compañía realizada ayer (ver nota relacionada), que van a esperar a el pronunciamiento de la Inspección del Trabajo para saber exactamente cómo dar término al conflicto.
"Esta es una situación muy compleja (...). La realidad competitiva de este país no permite que nosotros mantengamos una brecha de costos tan alta con nuestra competencia", explicó Cueto. "Ya somos una compañía que tiene mejores rentas, sueldos, beneficios y menos flexibilidad, por lo tanto seguir aumentando esa brecha con el resto de las empresas realmente es hipotecar el futuro y el desarrollo de Latam en el tiempo", complementó.
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Según fuentes cercanas a la compañía, la empresa no estaría de acuerdo con que el sindicato acoja la última oferta, puesto que ya había sido rechazada por los tripulantes anteriormente a través de una votación. Además, señalan que la opción que estarían tomando los trabajadores no sería legal, puesto que, a su juicio, sólo podrían acoger la última oferta de forma individual y no masiva como lo hizo el sindicato.
En tanto, los dirigentes sindicales de Lan Express señalaron que esta alternativa sí es válida, porque la empresa nunca realizó el retiro oficial de la oferta.
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"Lo que nos sorprende es que desconozcan que la huelga terminó y que haya alguna duda respecto al contrato que firmamos. Cualquier sindicato tiene el derecho a suscribirlo", puntualizó Patricia Silva, asesora legal de Lan Express.
Pese a la continuidad del debate entre los dos frentes, hasta el cierre de la edición de ayer, la DT aún no se había pronunciado sobre la legalidad del término de la huelga.P