Si hay algo que es seguro es que a los mercados no les gusta la incertidumbre, especialmente cuando es generada por temas políticos. Esto es particularmente importante para los inversionistas extranjeros, que representan gran parte de los volúmenes transados del IPSA. Entre las razones que producen esto están el que Chile siempre ha sido considerado un país estable donde los inversionistas pueden invertir basados en fundamentales y dormir tranquilos por la noche y que es un mercado pequeño (10% del MSCI Latam y cerca de 1% del MSCI Emergente), por lo que prefieren gastar sus energías en entender problemas mayores en países como Brasil o México, que en conjunto pesan un 85% del MSCI Latam.

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En tiempos de incertidumbre, los inversionistas extranjeros no pierden demasiado tiempo en entender a fondo qué está pasando en nuestro país, sino que prefieren marginarse hasta tener más claridad de las potenciales consecuencias para las reglas del juego y para el crecimiento de las utilidades de las compañías. Los resultados de la primera vuelta de la elección presidencial fueron un reflejo de esta aversión a la incertidumbre política de los inversionistas extranjeros que, en conjunto con los fondos mutuos, prefirieron bajar su exposición a Chile llevando a una baja de 6,5% del IPSA, la mayor caída semanal desde finales de 2011.

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¿Es esta caída del IPSA una clara oportunidad de compra? En nuestra opinión, no lo es, ya que si bien estamos convencidos de que la mejora económica global (sincronía en crecimiento) y mayores precios de materias primas garantizan una recuperación en utilidades a partir del 4T17, con la corrección de esta semana el IPSA pasó de estar transando a 19,2x P/U 12M FWD (o dos desviaciones estándar sobre el promedio de 15,7x), hasta 17x (una desviación estándar), lo que se encuentra en línea con el resto de los mercados emergentes y no a descuento que podría justificar la posibilidad de tomar el riesgo.

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Dicho esto, cuando los inversionistas aprietan el "botón de pánico" y se producen ventas generalizadas del índice, se generan algunas oportunidades de corto plazo a las que hay que estar atentos a la presión que vimos en compañías con baja exposición al país, como es el caso de algunas empresas exportadoras (especialmente celulosa y vinos), eléctricas sin exposición a Chile (como Enel Américas) o compañías de rentas inmobiliarias que tienen más de un 80% de sus contratos de largo plazo.

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*El autor es economista Banco Santander.