El banco BBVA dio el miércoles un nuevo paso para sanear su balance del ladrillo con la venta al fondo de inversión Cerberus del 80% de sus activos inmobiliarios y el negocio de gestión de los mismos por unos 4.000 millones de euros (US$4.700 millones).

Teniendo en cuenta las cifras facilitadas por BBVA y según cálculos de Reuters, el descuento implícito de esta operación sobre el valor bruto de los activos asciende al 61,5%, en línea con las provisiones realizadas.

El banco indicó en una nota a la CNMV que la operación no generará impacto negativo en sus beneficios.

Las acciones reaccionaban con alzas del 1,2% en un contexto alcista en el que el Ibex remontaba un 0,88%.

La entidad sigue así los pasos de su rival Santander, que en verano vendió el 51% de la cartera inmobiliaria adquirida con la compra de Popular a Blackstone con un descuento del 66% sobre el valor bruto de los activos.

Esto se enmarca en la venta de activos que está llevando adelante la entidad financiera que incluye la operación de la filial en Chile con Scotiabank que ayer fue oficializada ante el regulador español y que valoriza al banco en US$3.200 millones.