Partiendo por la anticipada primera decisión de política monetaria desde que Jerome Powell tomó las riendas del Comité de la Reserva Federal de EEUU, esta semana estará marcada de noticias. Y si los números de los mercados internacionales dicen algo, es que los inversionistas están ansiosos.
Pasadas las 10.30, las monedas emergentes retrocedían casi en bloque, con contadas excepciones. Las caídas las lideraba el rand sudrafricano, con una contracción de 0,88% frente al dólar. Ninguna moneda latinoamericana, por su parte, operaba en números verdes.
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En el caso del peso chileno, mantenía la tendencia reciente de debilidad frente al billete verde: el tipo de cambio marcaba un aumento de $1,8 con respecto al cierre del viernes, operando en $601,1, su nivel más alto en más de dos meses.
Con contadas excepciones, las bolsas también operaban a la baja, con especial intensidad en el Reino Unido. El benchmark inglés FTSE 100 operaba con una caída de 1,24% luego de que se conociera que ya hay un borrador sobre el futuro del Brexit.
En América, Wall Street reflejaba una pérdida de 0,7% en el Dow Jones y un alza de 0,17% en el S&P 500, mientras que un sell off de acciones tecnológicas presionaba a la baja al Nasdaq. Chile, por su parte, seguía la tendencia latinoamericana de bajas contenidas mientras el IPSA cedía un 0,3% hasta los 5.579,88 puntos.
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Los commodities también sentían el golpe del nerviosismo en la mañana, con bajas sobre el 1% en el gas natural y las materias primas agrícolas, como el maíz, el trigo, el azúcar y el algodón. El cobre sufrió el impacto con una contracción de 1,9%, cerrando la sesión de la Bolsa de Metales de Londres en US$3,0806 por libra según cifras de Cochilco.
Datos recopilados por Bloomberg apuntan a que la probabilidad incorporada en el mercado de que la Fed suba las tasas en su reunión de este miércoles es de 100%. Lo que tiene nerviosos a los inversionistas, comentan agentes del mercado, son las señales que pueda dar el principal banco central del mundo hacia el futuro.
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En febrero, datos macroeconómicos en EEUU que podrían decantar en una Fed más agresiva con el proceso de normalización de la política monetaria gatilló un sell-off de activos de riesgo que trajo consigo fuertes caídas en Wall Street.