Continúan los intentos del Ejecutivo por aglutinar fuerzas que se sumen a respaldar su iniciativa de 41 horas promedio. Con ese objetivo, ayer se reunió con sindicatos de distintas empresas para explicar su iniciativa.
Al término del encuentro, el ministro sostuvo que esperan que "el proyecto de adaptabilidad laboral avance prontamente" y con ello evitar que esta iniciativa se tope cuando la reforma previsional llegue al Senado. Si bien el ministro no quiso señalar plazos concretos para ingresar la indicación, que modifica la jornada laboral ordinaria de 45 horas a 41 horas promedio, el objetivo del gobierno es que ingrese una vez que sea aprobada en la Comisión de Trabajo del Senado el proyecto de sala cuna universal, lo cual debería concretarse la primera semana de septiembre.
Con respecto a la propuesta que trabajará la CPC junto a algunas centrales sindicales, el jefe de la cartera aseveró que "todos debemos unirnos para hacer la mejor regulación y la mejor ley para nuestro país", y enfatizó que "todas las propuestas que tengan en el corazón la mejor calidad de vida de los trabajadores, la responsabilidad y la productividad, son bienvenidas", apuntó al término de una reunión con varios representantes empresariales y sindicales.
El ministro también se refirió a la reforma previsional y comprometió una vez más que trabajarán "más de 40 horas" para que el proyecto de ley sea realidad este año y así comenzar a pagar las nuevas pensiones el 1 de enero.