Durante el año 2018, el ingreso laboral promedio de la población ocupada en el país fue de $573.964 neto mensual, mientras que el ingreso mediano -el que recibe un individuo representativo de la mitad de la población- llegó a $400.000 al mes. Es decir, el 50% de los trabajadores del país percibió ingresos menores o iguales a ese último monto.
Así se desprende de la Encuesta Suplementaria de Ingresos (ESI) 2018 que el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) hoy.
En el detalle, los ingresos medio y mediano de los hombres se ubicaron en $652.397 y $411.100, respectivamente, mientras que en las mujeres, éstos alcanzaron los $474.911 y $343.234, respectivamente. Lo anterior implicó brechas de -27,2% en el ingreso medio (2,1 puntos porcentuales (pp.) menor a 2017 y de -16,5% en el ingreso mediano (4,0 pp. menor a 2017), ambos en desmedro de las mujeres. Estas brechas son las menores desde el año 2010 (-32,8% en el ingreso medio y -23,9% en el ingreso mediano).
Al analizar cómo se distribuyen los ocupados que ganan una cantidad igual o menor al ingreso mediano ($400.000), el 50,2% corresponde a mujeres, mientras que el 43,5%, a trabajadores informales. Considerando grupos de edad, la encuesta dejó ver que el 11,5% son jóvenes entre 15 y 24 años y el 30,9% son adultos entre 55 y más años, lo que es 3,6 pp. y 3,2 pp. mayor a la proporción observada para el total de ocupados, respectivamente.
La mayor parte de la población ocupada (17,4%) percibió ingresos entre $300.000 y $400.000. Le siguieron quienes obtuvieron ingresos en el tramo de $200.000 a $300.000 (15,0% de los ocupados) y de $400.000 a $500.000 (12,8% de los ocupados). En contraste, un 13,3% de los ocupados tuvo ingresos mayores o iguales a $1.000.000 y solo un 1,7% de los trabajadores alcanzó montos iguales o superiores a $3.000.000.
Por categoría ocupacional, los empleadores fueron quienes recibieron los ingresos medio mensuales más altos ($1.260.180), seguido por asalariados públicos ($824.883), asalariados privados ($586.791), trabajadores por cuenta propia ($328.781) y personal de servicio doméstico ($246.995).
En relación a las regiones, la población ocupada de Magallanes fue la que consignó los ingresos medio y mediano más altos ($844.511 y $501.805, respectivamente). Por el contrario, Ñuble fue la región con menores ingresos medio y mediano ($414.209 y $300.000, respectivamente).
Educación
Según la ESI, en 2018 se mantuvo la relación positiva y creciente entre el ingreso y el nivel educacional que mostraron las mediciones de años anteriores. Ello, pues los mayores ingresos mensuales medio y mediano los obtuvieron quienes tienen postgrado ($1.783.373 y $1.500.000, respectivamente), mientras que los menores ingresos fueron recibidos por las personas con nivel educacional primario ($287.585 y $270.974, respectivamente).
Los ocupados con nivel educacional secundario representan un 43,8% del total de ocupados y perciben, en promedio, 0,4 veces los ingresos alcanzados por aquellos que poseen nivel educacional universitario.
A su vez, los grupos ocupacionales de mayor calificación percibieron los ingresos más altos. Así es como la categoría "directores, gerentes y administradores" registró los mayores ingresos medio y mediano ($1.706.233 y $1.200.000, respectivamente), en contraste con los ocupados en la categoría "ocupaciones elementales", que recibieron los menores ingresos medio y mediano ($276.226 y $280.000, respectivamente).