Las acciones de Boeing Co. se desplomaron al máximo en casi dos años después de que gastó más dinero de lo que esperaba Wall Street, lo que recuerda la presión que tiene el fabricante de aviones mientras enfrenta el aumento de la inflación y la detención de las entregas de su modelo 787 Dreamliner.

El titán de la aviación registró un flujo de caja negativo de US$3,57 mil millones en el primer trimestre y acumuló un mil millones de dólares en nuevos cargos contables para su división de defensa, según un comunicado emitido el miércoles. Boeing también está pausando la producción de su avión de pasajeros 777X hasta 2023 y posponiendo la entrega inicial del enorme avión bimotor hasta 2025.

“Este fue otro trimestre terrible para Boeing”, dijo en una nota Robert Stallard, analista de Vertical Research Partners. “Y lo que creemos que realmente preocupará a los inversionistas es que seguimos recibiendo más malas noticias”.

Los resultados resaltan la magnitud de los problemas que enfrenta el fabricante de aviones, que se extienden más allá de los retrasos del modelo 787. La empresa enfrenta el impacto de la guerra, del Covid y un escrutinio regulatorio más estricto a raíz de dos accidentes fatales del 737 Max.

Las acciones se desplomaron un 8,9 % a las 10:01 a. m. en Nueva York, la mayor caída intradiaria desde junio de 2020.

Los resultados mostraron un “trimestre más desordenado de lo que a cualquiera de nosotros nos hubiera gustado”, dijo el presidente ejecutivo de Boeing, Dave Calhoun, en una entrevista en CNBC. Mientras se avecina la inflación y una posible recesión, Calhoun es optimista de que la compañía genere utilidades este año por primera vez desde 2018.

Sin embargo, las acciones de Boeing moderaron su baja y cerraron con una caída de 7,53%. Así, los papeles de la empresa registran una racha de seis jornadas consecutivas a la baja. En valor bursátil, la empresa perdió US$ 7.233 millones.

La caída de las acciones de la aerolínea se dan una jornada en que los tres principales indicadores de Wall Street cerraron plano.